7 capitales europeas que, si no conoces, tienes que visitar en cuanto se pueda

Son muchos los que estamos deseando poder llenar maletas, coger la cámara de fotos, el pasaporte y… viajar. Aunque es posible que la nueva tendencia de viaje sea hacia lugares poco concurridos, lo cierto es que si aún no conoces algunas de estas ciudades europeas te animamos a que las visites en cuanto se pueda.

A continuación, una lista de las que, para nosotros son las más bonitas de Europa y que nos dan una visión general de diferentes estilos arquitectónicos y civilizaciones que pasaron por el viejo continente.  

Madrid

No podemos comenzar esta lista sino por la capital de nuestro país.

Madrid es una ciudad que nunca duerme. Cuanta con museos de referencia internacional como el Museo del Prado, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía o el Thyssen-Bornemisza, entre otros.

En ella nos encontramos restos de la época visigoda y romana, entre otros. Es Felipe II quien en 1561 la convierte en la capital de España. Desde ese momento asume el estilo que marcarán los Austrias. La llegada de los Borbones supone un desarrollo del Barroco, dejando obras como el puente de Toledo, el cuartel del Conde-Duque o el Palacio Real de Madrid, mientras que el palacio de Liria, la Puerta de Alcalá o el Museo del Prado son exponentes del neoclasicismo.

Además de estos, no podemos dejar de visitar el Retiro, pasear por Gran Vía, fotografiarnos junto a la Cibeles o Neptuno, tomar algo en la Plaza Mayor, caminar entre la Almudena y el Palacio Real, u observar el reloj de la Puerta del Sol, entre otras muchas opciones.

París

La ciudad del Sena es una visita obligada para los románticos. Ciudad famosa por la cultura, la moda o el lujo, en ella destacan la mezcla de edificios renacentistas, barrocos y contemporáneos.

Pero si hay un monumento icónico de esta ciudad, es sin duda la Torre Eiffel, símbolo de la revolución industrial.

Además de este monumento, visitar París significa pasear por la catedral de Notre Dame, la avenida de los Campos Elíseos, el Arco del Triunfo, la basílica del Sacre Coeur sobre Montmatre, el Louvre, entre otros muchos edificios y espacios famosos.

Londres

Cuna de una de las monarquías más longevas del mundo contemporáneo, Londres es una ciudad con diferentes e interesantes barrios.

Fundada por los romanos hace casi dos milenios, se trata de una de las ciudades más visitadas del mundo.

La Torre de Londres o el espacio formado por el Palacio, la Abadía de Westminster, la Iglesia de Santa Margarita y Greenwich cuentan con la declaración de Patrimonio de la Humanidad.

Otros lugares de obligada visita si viajas a Londres son el Palacio de Buckingham, el London Eye, Piccadilly Circus, la Catedral de San Pablo, el Puente de la Torre o Trafalgar Square.

Recorrer la ciudad bajo tierra es su metro es todo un viaje al origen de este tipo de transportes, ya que es el más antiguo del mundo.

Berlín

Berlín es una ciudad mundial y un centro cultural y artístico de primer nivel. Es una de las ciudades más influyentes en el ámbito político de la Unión Europea y en 2006 fue elegida Ciudad Creativa por la Unesco.

Esta ciudad es una pieza clave en la historia moderna europea. Aunque no conserva el encanto de tener una parte antigua como en otras ciudades europeas, sí que posee edificios de una fortaleza histórica con el mismo poder como la Puerta de Branderburgo o el Muro de Berlín.

Otros de los lugares por los que pasear son el barrio Judío, Alexanderplatz o Berliner Unterwelten, entre otros.

Budapest

Toda una gran variedad cultural para el gusto de todos los públicos.

Praga

Esta pequeña ciudad es una de las más hermosas de Europa. Sufrió las dos guerras mundiales, y alternó la dictadura de nazis y soviéticos.

Praga, cuyo casco histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1992,​ es considerada una ciudad global de «clase Beta+», a la altura de Roma, Atenas o Berlín.

Roma

Conocida también como La ciudad Eterna, Roma llegó a ser la primera gran metrópolis de la humanidad y centro de una de las civilizaciones antiguas más importantes. Con más de tres milenios de antigüedad, visitar esta ciudad es viajar al pasado siguiendo las huellas de los romanos. El Coliseo, el Panteón, el Foro Romano, son algunos de estos restos, los cuales se mezclan con algunas de las obras arquitectónicas y escultóricas más bonitas del mundo como la Capilla Sixtina, La Fontana di Trevi, La Plaza Navona o la Plaza de España.

Es el corazón geográfico de la religión católica albergando la Ciudad del Vaticano con su Basílica de San Pedro.

No dudes en perderte por las callejuelas del barrio del Trastévere.