Avistamiento de aves: algunos de los mejores lugares de España donde disfrutarlo

Ha aumentado de forma notable en los últimos años y no es para menos, porque contemplar a las grandes aves en libertad, en su propio hábitat natural, es un experiencia tan bella y gratificante como educativa. Aves acuáticas, majestuosas águilas reales, cigüeñas, flamencos, buitres… el avistamiento de aves requiere paciencia y algo de espíritu de aventura, pero la recompensa de contemplar a estos animales emprendiendo vuelo es algo que no se olvida.

¿Dónde puedes disfrutar con la observación de aves en España?

Pocas veces reparamos en las aves que sobrevuelan nuestros cielos. Si las mirásemos más, nos sorprendería comprobar lo extraordinarias que son algunas especies por su belleza, su fuerza, o su capacidad para sobrevivir en espacios no siempre demasiado “confortables”. Por suerte, en la Península Ibérica existen numerosos lugares excepcionales para contemplarlas en su entorno o en aquel que eligen como lugar de descanso en su viaje hacia al continente africano o al resto de Europa. Si te gusta o quieres descubrir el turismo ornitológico, algunos puntos especialmente interesante para el avistamiento de aves son:

Parque Nacional de Monfragüe

Sin duda, uno de los mejores sitios para observar magníficos ejemplares de águilas, buitres o cigüeña negra, junto a otros cientos de aves, más discretas, pero igual de interesantes. En Extremadura, en la confluencia de los ríos Tajo y Tiétar, entre Plasencia, Trujillo y Navalmoral de la Mata, se encuentra este Parque Nacional, dentro de un espacio natural declarado Reserva de la Biosfera. Entre bosques de acebuche, alcornoques y encinas, que alegran los imponentes farallones del Parque, tienes distintos puestos de observación, entre los que destaca el conocido como “salto del gitano”.

Parque Nacional de Doñana

Entre las marismas y dunas de Doñana, entre Huelva y Sevilla, son muchas las aves migratorias que eligen cada año este magnífico humedal para hacer una pausa en su viaje. Llamativos flamencos, cercetas, aguiluchos laguneros, avutardas, abejarucos… son solo una pequeña muestra de las más de 300 especies de aves que viven en el Parque.

Parque Natural del Delta del Ebro

El caudaloso Ebro en su desembocadura crea un ecosistema único en todo el Mediterráneo occidental. El Parque Natural con más de 7.000 hectáreas, ocupa gran parte de las comarcas del Montsià y del Bajo Ebro y en él las grandes lagunas, rodeadas de juncales y resto de vegetación típica mediterránea, dan cobijo a un gran número de aves, principalmente acuáticas y marinas.

Laguna Gallocanta

Este bello paraje situado en Aragón, entre las provincias de Zaragoza y Teruel, es una de las zonas de paso de la grulla común de la que existen numerosas colonias que deciden descansar aquí en su ruta migratoria. La Laguna de Gallocanta, entre las comarcas de Daroca y Jiloca,  es un magnífico humedal de más de siete kilómetros de longitud, considerado, además, Reserva Natural. Situada en una zona de altiplano a más de 1.000 metros sobre el nivel del mar, ver en invierno a los bandos de grullas que regresan a la laguna al atardecer es un espectáculo de la naturaleza. Podrás contemplar otras muchas especies de aves, más de 200 especies distintas.