Descubre la belleza natural del valle del Pas gracias a estas rutas de senderismo

La preciosa zona cántabra de los Valles Pasiegos da cobijo natural y sirve de matriz para estas comarcas cuyos verdes prados parecen hechos de terciopelo. Unas zonas (Pas, Miera y Pisueña) que conforman un paisaje que destaca tanto por su patrimonio natural como por su riqueza etnográfica y cultural.

Precisamente, el valle del Pas, una de las zonas de la comunidad donde empezó el turismo termal con el Balneario de Puente Viesgo y Alceda, guarda preciosas rutas de senderismo para excursionistas. 

Vía Verde del Pas

Comenzamos nuestro recorrido con esta ruta de unos 12 kilómetros aproximadamente entre las localidades de Ontaneda y Alceda y Puente Viesgo. Todo un paseo por esta área de los Valles Pasiegos que incluso en algunos de sus tramos está acondicionada para personas con movilidad reducida. 

Sin duda, una de las paradas obligadas de esta vía verde es visitar la Cueva Prehistórica de El Castillo. Nada más entrar, en el vestíbulo se observa un yacimiento que incluye muestras desde el Paleolítico Inferior a la Edad del Cobre. Una vez adentrados en la cueva, la majestuosidad del lugar muestra al visitante pinturas rupestres de entre 30.000 y 10.000 años de antigüedad.

Miradores de Valnera

Un recorrido circular de más de 5 horas de duración por un rincón insólito de esta comarca que transita por toda la cuenca alta del río Pandillo. Un paraje único para descubrir bosques de hayedos, brezos y tejos y ver las preciosas praderas de Ruyemas.

Además, este paso nos da la oportunidad de contemplar las construcciones típicas de antaño de los vecinos dedicados a la ganadería. Los cabañales pasiegos eran cabañas hechas para esas explotaciones de ganado y servían de zona de paso cuando se llevaba a los animales a las praderas altas para pasar el verano y regresar a tierras bajas en otoño.

Riberas del Yera y Aján

Un itinerario que parte de la misma localidad de Vega de Pas para discurrir por las riberas del río Yera y la cuenca de su afluente principal, el río Aján. Se trata de un recorrido cómodo y con poco desnivel y que puede realizarse sin problema alguno.

Así, durante el mismo pasaremos junto a los cabañales de Horneo, Arejos, Los Praones y el Enverao e incluso podremos contemplar una antigua construcción que perteneció a un viejo molino de la zona. En definitiva, un paraje de una particular belleza natural gracias a los saltos de agua del valle de Aján que podremos ver a la vez que discurre esta ruta por el valle del Pas.