Victoria Herrero
Al aire libre
¿Qué son los ecoductos y por qué es una medida perfecta para los animales?
Pasos que se construyen con elementos naturales para que al animal no le resulte extraño
Se trata de salvar vidas, tanto la tuya propia como de los animales en caso de que estos se crucen en mitad de una carretera y tengamos un fatídicio accidente. Por ello, una de las soluciones es la construcción de puentes naturales que puedan salvar esas vías de circulación y por donde los animales puedan pasar sin peligro alguno, ni para ellos ni para conductores. Son los llamados ecoductos que se ubican sobre todo encima de autopistas y autovías de especial tránsito; pero también en vías ferroviarias.
Y es que según datos del propio Gobierno de España (@desdelamoncloa) de 2012 a 2017 se produjeron más de 120.000 siniestros en las vías interurbanas a nivel nacional con animales implicados. En esta cifra no se contemplan los datos de Cataluña y País Vasco, con competencias propias en la materia. Unos accidentes que tienen a jabalíes, corzos y perros como los principales protagonistas, especialmente al atardecer y por la noche cuando la visibilidad es más reducida.
Una solución para evitar accidentes con animales implicados
Como no, los países nórdicos son unos aventajados ejemplos a la hora de construir este tipo de pasos, normalmente con materiales naturales y ecológicos para que los animales no lo sientan como algo extraño, que poco a poco van siendo una realidad en nuestro país. En España, es obligado colocarlos a unas distancias concretas y dependiendo del tráfico de cada carretera.
Pero no solo se trata de una forma efectiva de evitar accidentes que pongan en serio peligro a los conductores, sino de preservar especies animales que puedan ir desapareciendo si mueren en las carreteras. Así, hay ecoductos para todo tipo de animales, desde redes o cuerdas por las alturas para que pasen especies de pájaros o incluso cangrejos, pasando por túneles subterráneos para animales salvajes o conductos hechos en las carreteras para reptiles o tortugas.
¿Qué hacer si atropellas a un animal?
Si se te cruza de repente un animal en la carretera y pese a tu pericia al volante no has podido esquivarlo y acabas atropellándolo, es obligatorio que te pares y te bajes para auxiliarle. Acércate con cuidado por si su instinto le lleve a defenderse. Si el animal ha resultado herido y tienen dueño, por una placa identificativa en caso de que sea doméstico, puedes ponerte en contacto con él o bien acudir a una clínica veterinaria. Si se trata de una especie cinegética no es mala idea llamar al Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA).
En el caso de que ese animal haya muerto debes apartarlo de la vía y llamar a la Guardia Civil (@guardiacivil) para dar parte del accidente y explicarle los hechos (para determinar la responsabilidad en cada caso o bien del animal o bien de una conducción temeraria por tu parte). Si huyes sin más te expones a una sanción de hasta 200 euros.