Lugares imprescindibles para descubrir el misterio y la belleza del Valle de Baztán

Este hermoso valle, de clima suave, enclavado en los Pirineos navarros se extiende entre los puertos de Belate y Otsondo, al Noreste de la Comunidad Foral (@TurimsoNavarra), agrupando a un total de 15 localidades que van salpicando los 360 kilómetros cuadrados aproximadamente, que ocupa el Baztán.

Caseríos tradicionales, antiguos palacios construidos por aquellos indianos que regresaron tras haber hecho fortuna en las Américas, coquetos molinos, queserías, monasterios o parajes naturales que sorprenden con su encanto y con leyendas sobre seres mitológicos o aquelarres… el valle de Baztan tiene algo mágico y mil rutas y senderos con los que descubrir algunos de sus secretos.

Las localidades que no te puedes perder

Para organizar una escapada, que te permita conocer algunos de los lugares más bonitos e interesantes del Valle, lo mejor es trazar tu propio itinerario en coche. Un fin de semana recorriendo sin prisas los paisajes de la llamada “Suiza navarra” puede ser un plan perfecto para toda la familia. En el valle el Baztán encontrarás numerosas opciones de alojamiento rural y son muchas las empresas que organizan excursiones y actividades para disfrutar de este paisaje natural excepcional.

Un buen punto de partida es Elizondo, capital del Valle de Baztán, que sorprende por su arquitectura tradicional y sus numerosos palacios y casonas señoriales blasonadas. Acércate a visitar el Palacio barroco de Arizkunenea y disfruta del ambiente, siempre animado de la Plaza de los Fueros, donde se encuentra el bonito edificio del Ayuntamiento. Si dispones de tiempo, visitar el Museo Etnográfico te dará idea de la riqueza de las tradiciones que aún conserva el valle.

Dejando la localidad y en dirección al pequeño pueblo de Ziga, merece la pena hacer una parada en el llamado Mirador de Baztán desde el que obtendrás una de las mejores vistas del valle y de los contrastes que crean las zonas de pasto, con sus caseríos, y las áreas boscosas de hayas y robles. Ya en Ziga, no dejes de visitar la iglesia de San Lorenzo.

Amaiur/Maya es otra de las localidades que no puede faltar en tu recorrido porque se trata de uno de los pueblos más bonitos de valle, en perfecta armonía con el verde paisaje que lo envuelve. Te llamará la atención el arco de entrada que da acceso a esta coqueta villa por la que transcurre un tramo del Camino de Santiago. El antiguo molino rehabilitado sigue en funcionamiento y es una amena visita muy recomendable. Desde aquí, parte un camino, de algo más de un kilómetros, que te llevará hasta el cercano Monte Gaztelu, donde está el monolito que recuerda la resistencia de Amaiur frente a la conquista de la Corona de Castilla.

Cuevas, cascadas y brujas

Son 15 los pueblos que dan forma al Valle y cada uno de ellos tiene algo que lo convierte en un lugar único. Los imponentes palacios de Arraioz, el Monasterio de Nuestra Señora de los Ángeles o el parque Escultórico Santxotena en Arizkun o las espléndidas torres medievales de Irurita, son solo algunos ejemplos de la riqueza cultural, histórica y arquitectónica que encierra este lugar, pero hay más.

El valle de Baztán guarda un sinfín de parajes naturales a los que resulta difícil resistirse, tanto por su belleza como por el halo de misterio y magia que los rodea.

Una buena propuesta para descubrir alguno de ellos es acercarte hasta la cascada de Xorroxin. Tienes rutas de senderismo que parten de las poblaciones de Erratzu (unos 7 kilómetros) o Arizkun (10 kilómetros de sendero circular) y las dos son perfectas para sumergirte en este paisaje de prados que riega el río Baztán. Como premio, al final del recorrido se encuentra el salto de agua de Xorroxin, donde según la leyenda las lamias (“sirenas”) cuidan sus largos cabellos con peines de oro.

Si quieres un poco más de misterio, muy cerca del Valle, puedes animarte a seguir la ruta que une las cuevas de Urdax, una maravilla natural donde estalactitas y estalagmitas crean formas “imosibles” y las de Zugarramurdi, lugar favorito de brujas para la celebración de sus aquelarres y donde cuentan que algunas de ellas fueron quemadas por la Inquisición. La famosa cueva se encuentra a menos de un kilómetro de la localidad del mismo nombre donde si te apetece, también puedes visitar el original Museo de las Brujas.

Misterio y naturaleza van de la mano también en la ruta que lleva hasta el Infernuko Errota, partiendo de la bonita localidad de Lekaroz. Se trata de un antiguo molino que aprovecha las aguas del arroyo Infierno y se presenta inmerso en una tupida vegetación que hace que resulte un lugar muy especial. A las faldas del Monte de Lagate, el pequeño pueblo despliega todo su encanto y te invita a acercarte a este molino, disfrutando durante el camino de la belleza del paisaje que ofrece el espeso bosque atlántico.

El valle navarro del Baztán te propone un fin de semana perfecto en plena naturaleza, con opciones para todos los gustos. Paisajes, gastronomía, misterio, arte y tradición son solo algunos de los ingredientes que lo convierten en un destino apetecible en cualquier época del año.