Carlos Losada
Al aire libre
Pura naturaleza en las burgalesas Lagunas de Neila
Carlos Losada
Foto: Bigstock
Lunes 14 de octubre de 2019
ACTUALIZADO : Lunes 28 de octubre de 2019 a las 9:49 H
4 minutos
De origen glacial, estas lagunas ofrecen un bello paraje donde hacer múltiples rutas de senderismo
Al este de la provincia de Burgos, en plena Sierra de la Demanda, encontramos uno de esos sitios que se ganarán tu corazón por la belleza y tranquilidad que ofrecen a todo el que los visita. Hablamos de las Lagunas de Neila, un paisaje de origen glacial que enamorará a los amantes de la naturaleza y a los aficionados al senderismo.
Declarado Parque Natural de Las Lagunas Glaciares de Neila en el año 2008, este espacio natural se caracteriza por la tremenda riqueza de su flora y de su fauna, así como por ofrecer bellos paisajes donde la vegetación se mezcla a la perfección con las propias lagunas.
¿Cómo llegar?
El acceso a las Lagunas de Neila es sencillo en coche (o en autobús si se va en una excursión). En este sentido hay dos opciones: subir desde la población que les da el nombre, es decir, Neila, que es la más cercana, o hacerlo desde Quintanar de la Sierra. Cualquiera de las dos ofrece una ascensión atractiva, aunque en invierno pueda ser complicada cuando nieva.
Las lagunas
Una vez arriba, lo mejor que puedes hacer es acercarte a la Casa del Parque de las Lagunas de Neila, situada en la iglesia de San Miguel de la villa, ya que allí te informarán de las diferentes actividades que puedes realizar en la zona, así como de los itinerarios caminando o en bicicleta o de las visitas guiadas que se llevan a cabo durante la jornada.
No obstante, puedes ir directamente a ver las lagunas porque no tienen pérdida. Si estás más o menos en forma, podrás hacer todo el recorrido dando un agradable paseo, pues no hay grandes desniveles. Las dos lagunas más grandes, situadas a una altura superior, se encuentra en sendos circos glaciares y se llaman Laguna Negra y laguna Larga. La primera es algo mayor y no se debe confundir con la Laguna Negra que está cerca de la localidad de Vinuesa (Soria), ya que se encuentra relativamente cerca.
Más abajo, y formadas por el desagüe de las anteriores, hallamos la laguna de Las Pardillas y el nicho del Contadero, así como otras dos llamadas de Los Patos y Brava. Eso sí, la más espectacular de todas es la laguna de la Cascada, llamada así por el espectacular salto de agua que cae desde las lagunas superiores. Dicha cascada llega a congelarse en invierno y los escaladores más osados se aventuran a ascenderla con sus picos y crampones.
Como hemos apuntado, el recorrido es accesible para cualquier persona que tenga una movilidad normal y una mínima condición física. Eso sí, sobre todo si la visita no se hace en verano, conviene llevar siempre algo de ropa de abrigo, pues la temperatura no suele ser demasiado elevada.