Teresa Rey
Al aire libre
Recorre la Selva Negra en autocaravana o en coche
Teresa Rey
Martes 4 de junio de 2019
ACTUALIZADO : Miércoles 3 de julio de 2019 a las 18:10 H
3 minutos
Es un zona boscosa de Alemania llena de pueblos, lagos y senderos en los que perderse varios días
La Selva Negra es uno de los entornos naturales más espectaculares del suroeste de Alemania, ideal para recorrer en autocaravana o en coche. Se trata de una zona boscosa que en este país conocen como Schwarzwald. La frondosidad de la vegetación ha rodeado la zona de un halo de misterio que junto a numerosos pueblos medievales de ensueño completan el atractivo de esta región. Además, la zona está llena de senderos, lagos y densas forestas por las que perderse. Estas son algunas de nuestras propuestas, aunque hay muchas otras opciones y parajes en los que perderse durante varios días.
El Sur
Friburgo es una de las ciudades de entrada a este amplio paraje boscoso. Aquí hay que hacer un alto en el camino y pasear por el casco antiguo, contemplando la catedral, cuya torre es espectacular y su entorno. Podemos seguir hacia el sur y detenernos en el lago Titisee, donde es necesario pararse un buen rato, contemplarlo y, si queremos, perdernos por alguna de las rutas de la zona.
Friburgo
A continuación nos toparemos con las cumbres de los montes Feldberg y Belchen. El primero tiene una altura de 1.493 metros, y es el más alto de la Selva Negra, el paraíso de los esquiadores en invierno. La localidad que lo alberga es una población con las típicas construcciones puntiagudas de la zona. Un poco más adelante está Belchen, otra de las cimas de la zona sur a la que también podemos ascender.
Monte FeldbergEl Norte
Si cambiamos de dirección y nos dirigimos hacia el norte, además de las impresionantes vistas que iremos descubriendo a nuestro paso por las carreteras que atraviesan la Selva Negra, la cascada de Triberg, la más alta de Alemania, merece una parada. Pero este pueblo destaca además por poseer el “reloj de cuco más grande del mundo”. Esta singular construcción se ubica en las afueras del pueblo a un margen de la carretera, que no tiene pérdida. Estaremos en la llamada zona de los relojes, donde este tipo de accesorios (los de cuco) cobran un especial protagonismo como podremos apreciar en las tiendas de los pueblos.
La siguiente parada es Gengenbach, que se encuentra en la ruta hacia la ciudad balneario de Baden-Baden. Es un auténtico pueblo de cuento, de hecho sus calles han sido el escenario del rodaje de varias películas como la de Charlie y la fábrica de chocolate. Hay que pasear con calma por sus calles empedradas y disfrutar de los detalles de cada una de sus casas típicas.
La última parada será en Baden-Baden, un enclave lleno de edificios históricos, establecimientos termales, casinos, teatro, hipódromo… Todo un ambiente de lujo que ofrece otra faceta de Alemania y de la Selva Negra.
Baden-Baden