Marco Herrera
Cine
100 aniversario del nacimiento de Fellini: las mejores películas del genio de Rimini
Marco Herrera
Foto: Walter Albertin/World Telegram - Wikimedia Commons
Domingo 19 de enero de 2020
10 minutos
Cuando hablamos de Fellini, lo hacemos de uno de los directores cruciales en la historia del cine
Marco Herrera
Foto: Walter Albertin/World Telegram - Wikimedia Commons
Domingo 19 de enero de 2020
10 minutos
Federico Fellini es uno de los mayores genios de la historia del cine, y este próximo 20 de enero se cumplirán los 100 años de su nacimiento en la localidad costera de Rimini. El realizador italiano, que empezó su carrera como historietista, pasó más tarde por la escritura, llevando a cabo guiones tan importantes como el de Roma, ciudad abierta (1945), film dirigido por su amigo y compañero Roberto Rossellini.
Sus primeros pasos en la dirección estuvieron marcados por el neorrealismo italiano, género con el que consiguió varias de sus primeras obras maestras, como Los inútiles (1953), La Strada (1954) o Las noches de Cabiría (1957). Más tarde, trascendió a esta vanguardia y se fue caracterizando por un estilo mucho más personal, deslabazado, donde las tramas pasaban a un segundo lugar en detrimento de las emociones que brotaban en cada escena. Prueba de ello pueden ser La Dolce Vita (1960), 8½ (1963) o Amarcord (1973). El unánime aplauso de la crítica y la multitud de premios que cosechó durante su carrera, unido a la popularidad de muchas de sus obras, confirmaron a Fellini como uno de los directores europeos más importantes de la historia del cine, y probablemente el realizador italiano más relevante de toda la filmografía del país transalpino. Repasamos sus mejores obras.
Fellini y Mastroianni en el rodaje de 8½ (Cineriz)'Los inútiles' (1953)
Una película muy importante en su filmografía, donde el director alcanzó la mayoría de edad. Aunque El jeque blanco (19590) había marcado su debut como director, se trató de una obra mucho más ligera y de escaso éxito. I Vitelloni, título original en italiano de Los Inútiles fue un ejercicio autobiográfico, que mostraba muchos temas que definirían posteriormente el trabajo de Fellini, y que acabó convirtiéndose en un éxito considerable en Italia. Fue protagonizada por Alberto Sordi, quien se convirtió en una de las mayores estrellas de la comedia italiana en las próximas décadas.
Está ambientada en la ciudad costera de Rimini, lugar de nacimiento del director, y sigue a cinco amigos atrapados en la adolescencia, en la que apenas hacen nada y tratan de llevar el día a día de sus vidas con travesuras y fiestas en el aburrido pueblo costero, sobre todo en los meses de invierno. La trama se centra en Fausto (Franco Fabrizi), el líder del grupo, quien, aunque recientemente casado con su novia, sigue siendo un mujeriego; Leopoldo (Leopoldo Trieste), que quiere ser un dramaturgo y un inocente Alberto (Alberto Sordi), que todavía vive en casa con su madre y su hermana. El grupo lo completan Riccardo (Riccardo Fellini) y Moraldo (Franco Interlenghi), este último un alter ego de un joven Fellini.
Los inútiles se alzaría con el León de Plata en el Festival de Cine de Venecia y puso al cineasta en el mapa de grandes directores del contienente.
'La Strada' (1954)
Es el largometraje que dio impuslo internacional a Fellini y con el que ganó el primer Premio de la Academia a la Mejor Película Extranjera en 1956. A menudo se considera su primera obra maestra, así como el primero en dejar destellos del término que más tarde acabaría por definirse como "felliniano". Si bien la producción fue difícil y no fue inmediatamente comprendida por todos, al poco tiempo se convirtió en una sensación mundial tras ganar el director su segundo León de Plata consecutivo en Venecia y hoy en día es considerada como una de las mejores y más influyentes películas de la historia.
Gelsomina (Giulietta Masina) una joven proveniente de las clases más pobres, es vendida al fuerte Zampano (Anthony Quinn) por su madre, después de que su hermana muriese mientras viajaba con él. Aunque es una joven educada, noble e ingenua, Zampano la trata con constantes faltas de respeto y actúa violentamente contra ella.
Vista como su ruptura definitiva con el neorrealismo, el movimiento con el que se asoció al principio de su carrera, La Strada marcó el momento en el que el cineasta se convirtió en un referente mundial y verdadero autor. Todos los elementos están en ella: el realismo romántico, el circo, la fusión de la fantasía y el barroco con el realismo, una maravillosa partitura de Nino Rota, un papel principal magistralmente interpretado por Giulietta Masina y una visión extremadamente personal. La Strada se convirtió en un enorme éxito mundial.
'Las noches de Cabiria' (1957)
La Dolce Vita (1960) y 8½ (1963) están a menudo en lo más alto de las listas de las mejores películas del autor, pero en Las noches de Cabiria se encuentran ya muchos de los elementos estilísticos por los que las obras mencionadas son populares, elementos que claramente ya se estaban desarrollando aquí.
Cuenta la historia de una prostituta romana ingenúa y benévola, que una y otra vez es golpeada y humillada, pero siempre logra mantenerse optimista y esperanzada en su búsqueda del amor verdadero. Cabiria (Giulietta Masina) parece tener más que mala suerte en la vida.
Una obra maestra tragicómica y verdaderamente felliniana, llena de momentos fantásticos y ligeramente surrealistas. Su esposa, Giulietta Masina, posiblemente ofrezca su mejor actuación en una de las películas de su marido. Su interpretación de la ingenuidad y el optimismo de Cabiria es ya histórica. Ganó el Oscar a la Mejor Película Extranjera, lo que la convirtió en la segunda consecutiva de Fellini, ya que había ganado el año anterior con La Strada (1954). Masina también se llevó a casa el premio a la Mejor Actriz en Cannes.
'La Dolce Vita' (1960)
Una de las obras de arte europeas más influyentes y exitosas de la década de 1960 y de todo el siglo XX, La Dolce Vita de Frederico Fellini es la película por la cual los críticos acuñaron definitivamente el término "felliniano" para describir su distintivo estilo poético y extravagante. Se puede argumentar que fue la que realmente abrió las compuertas para el cine de arte europeo en el extranjero y hasta el día de hoy el título se menciona a menudo en muchas obras de otros directores de renombre.
Consta de un prólogo, siete episodios y un epílogo en el que el espectador se embarca en un viaje por la Roma decadente y hedonista a través de los ojos del periodista sensacionalista Marcello Rubini (Marcello Mastroianni) mientras se mueve por la ciudad eterna entre la jet set internacional y su aristocracia. Llena de imágenes alucinantes y poéticas, capturadas en una gloriosa fotografía panorámica en blanco y negro, el film pinta una imagen de la "nueva" Roma como un lugar profano, decadente y moralmente vacío, reconstruido en la pobreza del período de posguerra a través de la economía, milagro de finales de los años cincuenta. Marcello busca el significado en este paisaje casi surrealista, pero finalmente no lo encuentra y parece simplemente aceptar su estilo de vida superficial y el de la ciudad.
La Dolce Vita fue un largometraje fundamental en la carrera de Fellini. Se amplió en gran medida el estilo poético y las características carnavalescas que ya habían estado presentes en sus obras anteriores como La Strada (1954) y Las Noches de Cabiria (1957), y también comenzó una larga y fructífera colaboración con Marcello Mastroianni, quien pasaría a protagonizar otras cuatro obras del director.
Ganó la Palma de Oro en Cannes en 1960 y fue nominada a cuatro Premios de la Academia, en la que solo ganó uno por Mejor Diseño de Vestuario. Un gran logro en la historia del cine italiano y europeo, La Dolce Vita es una película verdaderamente icónica, que se ha abierto camino en la cultura popular.
'8½' (1963)
Otra de las películas europeas más influyentes y exitosas de la década de los 60, que trata con el bloqueo del escritor y director en la vida real, haciendo una retrato el proceso artístico y los problemas que este conlleva.
El director Guido Anselmi (Marcello Mastroianni) está en medio de una producción a gran escala, pero no tiene ni idea de cómo proceder, ya que los asuntos profesionales y personales siguen interfiriendo y causando problemas para encontrar inspiración de cara a terminar el film. La presión lo hace retirarse a sus propios recuerdos, sueños y fantasías que pronto comienzan a mezclarse con la realidad, hasta que todos acaban interconectados e imposibles de distinguir, creando así un rico tapiz de la psique de Guido y su proceso artístico.
El título hace referencia a que esta es el trabajo de Fellini ocho y medio como director, la mitad representa dos cortometrajes que dirigió. Podría decirse que es una de las mejores que se han hecho sobre el proceso cinematográfico en sí y, sin duda, una de las mejores sobre el bloqueo del escritor, la falta de inspiración y algunos de los obstáculos encontrados durante el proceso artístico.
Ganó dos Premios de la Academia a la Mejor Película en Lengua Extranjera y al Mejor Diseño de Vestuario, el Gran Premio en el Festival de Cine de Moscú y siete premios del Sindicato Nacional Italiano de Periodistas de Cine, incluyendo Mejor Director y Guión. Fue la clara inspiración de Recuerdos (1980) de Woody Allen y de Empieza el espectáculo (1979) de Bob Fosse. Una película diferente a todo lo anterior y una de las obras maestras de todos los tiempos.
'Amarcord' (1973)
Amarcord significa "recuerdo" en el dialecto de Emilia Romagna, donde creció Fellini. No es sorprendente que la película sea una historia de autoevaluación semi-autobiográfica y enormemente nostálgica.
Presentada como una colección de anécdotas episódicas, Amarcord está hecha para parecer un recuerdo donde los hechos y la fantasía se mezclan y la nostalgia nubla la visión. La película se centra en la familia de Titta, un adolescente que crece en el pequeño pueblo de Borgo San Giuliano en la Italia de antes de la guerra a medida que aumenta el fascismo. El espectador es testigo de los días del niño en la escuela, sus extraños maestros, su despertar sexual, las vacaciones en la ciudad, la influencia de la iglesia católica y otros eventos aleatorios como su tío loco que se niega a bajar de un árbol durante un día familiar en el campo.
Es una de las mejores representaciones de nostalgia personal jamás puesta en pantalla, mientras que al mismo tiempo logra pintar una imagen más amplia del estado mental en el que se encontraba el país. Humorística y sentimental, extremadamente personal pero ambiciosa, Amarcord se encuentra entre las mejores películas del realizador y fue su última obra maestra. Aclamada por la crítica mundial en el momento de su lanzamiento, ganó el Premio de la Academia a la Mejor Película Extranjera al tiempo que Fellini fue nominado a Mejor Director y Mejor Guión Original.