De sus convicciones políticas da idea el hecho de que en 1975, encabezase la huelga de actores en la que se reclamaba un día de descanso en los teatros junto a Concha Velasco o Juan Diego con quienes tomaron el sindicato. De hecho, la pareja vivió seis meses exiliados en México y allí establecieron una estrecha relación con Latinoamérica que jamás se ha roto y sigue felizmente viva a día de hoy.
Desde que dejó el Español en 1970 la desarrolló una intensa carrera en varios frentes, teatro, música, cine y televisión triunfando siempre y siendo siempre considerada una figura indiscutible fuera cual fuese el medio en que aparecía.
Entre sus más de 40 películas todo el mundo recuerda títulos como Morbo o Al diablo, con amor, dirigidas por Gonzalo Suárez; El amor del capitán Brando o Jó, papá con Jaime de Armiñán; La petición de Pilar Miró; La oscura historia de la prima Montse, dirigida por Jordi Cadena; La colmena, Después del sueño o La casa de Bernarda Alba de Mario Camus; La corte del Faraón o Divinas palabras con José Luis García Sánchez; Adiós pequeña con dirección de Imanol Uribe; Sé infiel y no mires con quién o La reina de España de Fernando Trueba; Miss Caribe o Rosa Rosae con Fernando Colomo; La pasión turca o Libertarias de la mano de Vicente Aranda…
En televisión se estrenó el año 1968 en un programa dramático emitido en el segundo canal de TVE, Hora once. Después vendrían innumerables apariciones durante los siguientes 50 años. Crimen y castigo, La pequeña Dorrit, Antígona, Retablo de las mocedades del Cid, Romeo y Julieta, Fortunata y Jacinta…
Sus casi innumerables apariciones en teatro se cuentan también por éxitos como El sí de las niñas, Sabor a miel, Tio Vania, La hija del aire, La gallina ciega, La casa de Bernarda Alba, Hamlet, La gallarda, El mercader de Venecia, Fedra, Electra, Kathie y el hipopótamo, Medea…
Y qué decir de su carrera musical. Hay quedarán para siempre Agapimú, Desde mi libertad, No volverán, El hombre del piano, La muralla, Solo le pido a Dios, España, camisa blanca de mi esperanza, Mira luna, La puerta de Alcalá, Contamíname, Mediterráneo, No sé porque te quiero, Peces de ciudad… O sus colaboraciones con Víctor Manuel, Miguel Ríos, Joan Manuel Serrat, Antonio Flores, Juan Luis Guerra, Ketama, Manolo Tena…
Como no podía ser de otra forma esta inmaculada y larguísima carrera le ha reportado a la incombustible Ana Belén reconocimientos y premios sin fin. Siete Fotogramas de plata por distintos trabajos en cine, teatro y televisión; el TP de Oro por Fortunata y Jacinta; dos Premios ACE en Nueva York por Demonios en el jardín y Traición; tres Premios Ondas por su dirección en Cómo ser mujer y no morir en el intento, Contamíname cantada junto a Víctor Manuel y su gira El gusto es nuestro con Víctor Manuel, Miguel Ríos y Serrat; dos premios en el Festival de Cine San Sebastián por Morbo y La corte del Faraón; Mejor Actriz en el Festival de Montecarlo por Cosas que hacen que la vida valga la pena; un Premio FIT; Premio Actúa de Aisge; un Grammy Latino a la Excelencia Musical; Caballero de la Orden de las Artes y las Letras de Francia; Medalla de Oro de la Academia de las Artes y y las Ciencias Cinematográficas de España; Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes; Premio Goya de Honor por toda su carrera… y así hasta cerca de 70 galardones que dan buena fe de que Ana Belén es una de las imprescindibles del mundo del arte en España.