Bruce Willis cumple 65 años y repasamos sus mejores películas

Conocido mundialmente por ser uno de los héroes de acción más carismáticos del cine de los 90, Bruce Willis ha sido protagonista de varias de las películas más taquilleras de las últimas décadas. Nacido en Alemania debido a que su padre era un soldado americano destinado allí, su carrera artística comenzó relativamente tarde, en 1980, ya con 25 años. El próximo 19 de marzo Willis cumplirá 65 años, por lo que destacamos algunos de sus trabajos más relevantes.

Jungla de cristal (1988)

Esta es la película que convirtió a Willis en una gran estrella de cine, y solo obtuvo el papel del agenta John McClane porque muchos otros grandes actores de Hollywood lo rechazaron. Con McClane, un personaje que podría no haber pasado de ser otro héroe de acción más en una época en la que eran abundantes, Willis consiguió dotar de un carisma especial al personaje y lo convirtió en uno de los más conocidos de la historia en el cine de acción.

Se trata de un tipo que viste con una camiseta sucia y se queja de sus suegros mientras se arrastra por las rejillas de ventilación: todo el mundo puede verse a sí mismo en McClane. Jungla de cristal es una película de acción al estilo de antes, pero también se puede considerar un clásico navideño, aparte de un enorme éxito de taquilla. Es el producto perfecto.

Pulp Fiction (1994)

Reservoir Dogs (1992) demostró que Quentin Tarantino era un cineasta a tener en cuenta, pero Pulp Fiction lo consagró como referente en Hollywood. Con su narración no lineal tan característica, estructura inspirada en la literatura, violencia explícita, uso excesivo de tacos y abundancia de referencias de la cultura pop a través del prisma de los personajes, Pulp Fiction es la película por excelencia de Tarantino.

Desde el monólogo de Christopher Walken sobre el reloj de oro del padre de Bruce Willis hasta Samuel L. Jackson recitando la versión de Sonny Chiba de un versículo de la Biblia, la película está llena de comedia negra, momentos inolvidables, iconografía reconocible al instante y actuaciones atemporales. Una obra maestra en la que Willis juega un papel crucial.

12 monos (1995)

Al igual que con la mayoría de las películas de Terry Gilliam, antiguo miembro de los míticos Monty Python, 12 monos era demasiado surrealista para ser digerida por una amplia audiencia. Ayudó que Bruce Willis y Brad Pitt estuvieran en los papeles principales, y que la trama fuera más fácil de seguir que la sátira distópica extremadamente compleja de Brazil (1985), pero aún así no se convirtió en un gran éxito de taquilla.

Basado en el cortometraje francés La Jetée (1962), 12 monos es una caja de sorpresas llena de giros de guion en una historia de ciencia ficción: viajes en el tiempo, un futuro distópico, un brote viral, un levantamiento de culto.

El sexto sentido (1999)

Es la película que marcó la carrera de M. Night Shyamalan; y también la que lo obligó a finalizar cada película con un gran giro de guion. Mirando con perspectiva, ese giro costaría creerlo con la cultura audiovisual de los últimos 20 años. Willis habría sabido lo que era su personaje mucho antes de que Haley Joel Osment se lo señalara. Aún con sus lagunas de guion, la película se convirtió en un referente del género del terror y marcó una tendencia en este tipo de cine a principios del siglo XXI.

Looper (2012)

Antes de que Rian Johnson dividiera a la base de seguidores de La guerra de las galaxias con El último Jedi (2017), fue elogiado como una de las voces nuevas más emocionantes de Hollywood por su acción futurista en Looper. Joseph Gordon-Levitt interpreta a un "looper", cuyo trabajo es matar objetivos que un sindicato del crimen envía a tiempo en un campo vacío. Es un trabajo bastante simple: el objetivo aparece en su línea de tiempo, los mata y recoge el efectivo. Pero un día, el objetivo es una versión futura de sí mismo, interpretada por Willis. Ahí es cuando la trama se complica y las cosas se ponen interesantes.

Moonrise Kingdom (2012)

Moonrise Kingdom es la dulce y sincera dramatización de Wes Anderson sobre dos niños que se enamoran durante una acampada de Boy Scouts donde una terrible tormenta se dirige hacia ellos. Aunque para parte de la crítica sembró dudas la elección de Willis, no se puede negar que la película de Anderson es una delicia. En lugar de ser una historia romántica superficial más de Hollywood, Moonrise Kingdom habla sobre el amor y su naturaleza complicada. Historias paralelas de dos niños que se enamoran a la vez que sus padres. Una de las películas menos convencionales en la carrera del actor.