Carmen Machi ha confesado que "los personajes más importantes y los papeles más gratificantes han llegado en la madurez". La actriz también se ha mostrado muy agradecida por poder vivir de esta profesión desde los 18 años, y haber gozado de continuidad a lo largo de su carrera.
Así lo ha explicado en una entrevista con Europa Press en Barcelona, donde la semana pasada acudía a la proyección de la película La Voluntaria, de Nely Reguera.
Si bien ha lamentado que muchas actrices dejen de recibir propuestas a partir de cierta edad, ha asegurado que ella nunca ha sentido miedo a que el paso de los años viniera acompañado de menos oportunidades laborales: "Sería muy falsa y poco agradecida si lo dijera".
Machi (Madrid, 1963) ha destacado que durante sus más de cuatro décadas como actriz se ha sentido "muy libre" tomando decisiones y compaginando papeles en teatro, cine y televisión.
Para la actriz, es más interesante que los papeles de mujeres mayores de 50 años sean escritos por otras mujeres, "porque conocen más las claves de la situación que se vive en ese momento, y de la que se sale muy airosa".
'La Voluntaria'
En cuanto a su papel en La Voluntaria, Machi da vida a Marisa, una doctora de 65 años que tras jubilarse decide viajar a Grecia para colaborar en un campo de refugiados, donde sentirá "mucha empatía hacia los niños, que considera que son los más vulnerables".
Ahí conocerá al pequeño Ahmed, un niño perdido y sin familia, y se dará cuenta de que ella realmente está intentando "llenar un vacío importante" después de una vida entera dedicada a curar y ayudar a los demás en la sanidad pública.
Así, la película aborda la complejidad del "querer cuidar" y plantea al espectador cuáles son los limites del bienestar del otro y la propia satisfacción, y si se puede realmente ayudar sin renunciar a la comodidad de una sociedad occidental y consumista.
Un "homenaje" al querer avanzar
Ha destacado que La Voluntaria, que llegará a las salas el 10 de junio, es un drama que rinde "homenaje" al deseo de una mujer de querer seguir avanzando cuando atraviesa un momento vital que le resulta solitario y frustrante.
En ese sentido, Machi ha remarcado que independientemente de los retos y desafíos que supone cada papel, a nivel interpretativo "siempre tiene más dificultad una comedia, sin duda alguna".
