Ridley Scott responsabiliza a los millennials del fiasco en la taquilla de su última película

La crítica ha alabado la película del director Ridley Scott El último Duelo. De ella ha dicho cosas como que "es un portentoso producto cinematográfico" (Pepa Blanes en la Cadena SER) o es "una obra de potente e inteligente narrativa, certera en sus formas y elocuente en su fondo" (Oti Rodríguez Marchante en el diario ABC).

Sin embargo, tan favorables críticas no han tenido su reflejo en las taquillas y del por qué de esta situación ha hablado Scott durante el espacio Marc Marron's WTF Podcast: "¡Malditos milenials!".

"Creo que a lo que se reduce (el problema) es a que lo que tenemos hoy en día es el público que se ha criado con estos malditos teléfonos móviles. Los millennials no quieren que se les enseñe nada a menos que se lo digan en un teléfono móvil", ha acusado el director que el próximo 30 de noviembre cumplirá 84 años.

"Se trata de un despiste que ha sucedido donde se ha dado una confianza equivocada a esta última generación", apunta el director que libera a Disney, productora de la película, de cualquier responsabilidad sobre el fracaso. "Disney hizo un fantástico trabajo de promoción. A los jefes les encantó la película", ha confesado.

El Último Duelo es una película histórica asada en hechos reales que nos traslada a la Francia de 1386 para narrar el enfrentamiento entre el caballero (Matt Damon en la pantalla) y un escudero (interpretado por Adam Driver) al acusar el primero al segundo de haber abusado de su esposa (el personaje que interpreta Jodie Comer). El rey francés Carlos VI quien toma la decisión de que para dirimir la cuestión ambos mantengan un duelo a muerte. Y la trama se complica aún más cuando el rey decide que, en caso de ganar el escudero,  la esposa del caballero será quemada como castigo por falsas acusaciones.

La película, también protagonizada por Ben Affleck, costó la friolera de 100 millones de dólares y ahora se encuentra con el serio problema de haber recaudado apenas 27 millones en todo el mundo.

"Todos pensamos que era un guión estupendo. Y lo hicimos. No se puede ganar siempre. Nunca me he arrepentido de ninguna película que haya hecho. De nada. Aprendí muy pronto a ser tu propio crítico. Lo único de lo que deberías opinar es lo que acabas de hacer. Aléjate. Asegúrate de ser feliz. Y no mires atrás. Así soy yo", ha declarado Ridley Scott.