Convierte su pueblo en una galería de arte al aire libre a sus 92 años

Louka, un pueblo de la República Checa, luce precioso gracias al talento para la pintura de Agnes Kašpárková, una señora checa de 92 años que se pasa los meses de buen tiempo pintando a mano los marcos de las puertas y las ventanas de su pueblo natal con diseños florales.

Agnes Kasparkova, 90-Year-Old Czech grandmother and former agricultural worker who is turning her small village into an art gallery by hand-painting traditional Moravian motifs on the local houses and building, now in the project's 13th year #womensart pic.twitter.com/F8s3ueQDNX

— #WOMENSART (@womensart1) April 9, 2018

Esta aldea luce ahora con un precioso color azul resultado de los trabajos de Agnes Kašpárková que ha tomado el testigo de otra vecina que años atrás también pintaba las casas del pueblo, aunque ha sido ahora cuando estos preciosos y complejos diseños se han hecho viral.

Esta antigua agricultora, ahora reconvertida en ilustradora de edificios, no deja indiferente a nadie. Además de por sus hermosas obras de arte, esta señora de 90 años ha adaptado su estilismo cual grafitero con unas zapatillas deportivas de lo más moderna y actual. Además, deja constancia de su buen estado y forma física al adquirir posturas de las más ágiles para realizar sus obras de arte.

 

 

 

 

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Su pasión por la pintura le viene desde hace más de 30 años, los que lleva pintando a mano diseños florales en su tiempo libre.

Los diseños florales son tradicionales en Moravia, y con esta acción Agnes Kašpárková lucha por preservar esta tradición, además de llenar de alegría las calles de este pequeño pueblo de nos más de 1000 habitantes.

Louka luce ahora como una auténtica galería de arte al aire libre gracias a la energía de esta vecina.

Cada diseño es único y sin plantilla. Simplemente deja volar su imaginación, obteniendo preciosos resultados.

Sin embargo, Agnes Kašpárková no es la única señora de más de 90 años que ilustra los edificios y casas de su ciudad cual Okuda, sino que en Taichung, una aldea en el centro de Taiwán, Huang Yung-Fu también ha trasformado las casas de este lugar en auténticas obras de arte. Con su acción, ha logrado salvar un conjunto de casas de bajos recursos que iban a ser arrasadas por el gobierno local. Cada día pinta durante cuatro horas las paredes de las casas con coloridos colores y pintorescas figuras.

La pintura en la tercera edad

Las actividades artísticas como puede ser la pintura afectan de forma positiva en la salud y calidad de vida de las personas de la tercera edad. Son múltiples los beneficios que tienen para la salud este tipo de disciplinas ya que les ayudan a trabajar las capacidades de concentración, paciencia, perseverancia, disciplina y creatividad.

Por ello, nunca es mal momento para iniciarse en esta disciplina que, como vemos, no tiene edad.