Aprende a preparar el café-tónic, la bebida de moda para el verano

Cuando nos apetece tomar café, pero hace mucho calor, pensamos en un café con hielo. El café helado tiene un sabor maravilloso; pero puedes disfrutar de esta deliciosa bebida de una forma más refrescante gracias al café-tónic, la bebida de moda.

Estamos hablando de un café espresso mezclado con agua tónica dulce y burbujeante: una bebida carbonatada y con cafeína, al mismo tiempo, con sabor altamente refrescante. Además, no se necesitarás añadir azúcar porque el azúcar del agua tónica mezclada con quinina es suficientemente dulce.

Con solo dos ingredientes imprescindibles (café y tónica) y mucho espacio para la experimentación, es una propuesta veraniega infalible, muy popular en algunos países como Estados Unidos, que ya es tendencia en todo el mundo, como vemos en Instagram. 

Cómo prepararlo en casa

Preparar un café-tónic es muy fácil y accesible. La receta es muy fácil: café, tónica, hielo y si te gusta también una rodaja de limón. La proporción de los ingredientes depende de ti y de tu gusto. Puedes probar una parte de café espresso y dos partes de agua tónica. Para prepararlo primero vierte la tónica y el hielo en el vaso. Luego añade el espresso. Finalmente agregue la ralladura de limón.

Contar con una tónica de alta calidad y un café de alta calidad que esté bien preparado es imprescindible. Un grano de café afrutado como los de Etiopía combina bien con el sabor cítrico de la quinina. Sin embargo, un grano de café de sabor tostado granos o a chocolate agregarán profundidad a la bebida. Si el limón es demasiado ácido para tu gusto, es mejor que pruebes con la ralladura de una mandarina, o naranja. Al agregar tu tónica preferida, puedes probar con diferentes sabores (como pomelo o jengibre).

Para los últimos pasos, agrega hielo casi hasta el borde del vaso y luego lentamente agrega el espresso en la parte superior. Pero cuidado, el orden en el que vierte los ingredientes puede marcar la diferencia. Si agregas el café directamente al agua tónica, se crea una reacción burbujeante que puede convertir la bebida en espuma y no resulta tan refrescante, ni tan equilibrada.

Por ello los pasos a dar son: poner el hielo, verter la tónica y luego el café como último paso. Porque si viertes el espresso primero, en primer lugar, vas a derretir un poco del hielo, y también haces que la tónica se espume un poco.