¿Qué es el bulgur y cómo puedes incorporarlo a tu dieta?

El bulgur, procedente de Oriente Medio, se ha colado en la dieta occidental por sus propiedades y lo sencillo que resulta de preparar. Te contamos en qué consiste y cómo puedes prepararlo.

Qué es el bulgur

Se trata de un ingrediente indispensable en la cocina de los países de Oriente Medio, preparado tradicionalmente a partir del trigo, y en algunos casos de la espelta. El proceso de elaboración del bulgur, hasta que se comercializa, es laborioso y delicado, pero a cambio el resultado es alimento precocinado saludable que se conserva muy bien y se cocina rápidamente.

Para preparar el bulgur, los granos de trigo se cuecen a fuego lento y de manera uniforme durante horas, agregando el agua según se va consumiendo. Una vez cocido, se deja secar durante varios días, y después se muele y tamiza para volverlo a poner a secar algunos días más. Una vez preparado, se comercializa en distintos grosores, que sirven para preparar distintas recetas. Puedes encontrarlo en la sección de alimentación ecológica de los supermercados o tiendas de granel.

Propiedades del bulgur

Al proceder del trigo, el bulgur no es un alimento apto para celiacos. Sin embargo es un ingrediente ideal para incorporar en nuestra dieta diaria por su versatilidad y propiedades: se trata de un cereal compuesto por hidratos de carbono de absorción lenta y bajo en grasas, por lo que resulta muy beneficioso para las personas que quieren controlar sus niveles de colesterol o vigilar su peso. 

Cómo preparar el bulgur

Puedes incorporar el bulgur a tu recetario como sustituto del arroz o de la pasta. Muy similar al cuscús, el bulgur es la base del tabulé en la receta original. Para elaborarlo, simplemente tienes que añadir dos partes de agua hirviendo por una de bulgur, y dejarlo reposar el tiempo que indique el fabricante (entre 30 y 7 minutos, en función del grosor del grano). Otra opción para disfrutar de este delicioso cereal es cocinarlo en sartén, preparando antes un sofrito o un salteado de verduras, e incorporándolo después junto a las especias y el agua. Simplemente cocido queda delicioso como acompañamiento en platos de estilo oriental, como el pollo al curry.