Victoria Herrero
Gastronomía
Restaurantes para disfrutar de Castellón comiendo
Espacios culinarios donde los sabores protagonistas son el mar y las verduras de temporada
La Comunidad Valenciana es un buen destino vacacional para pasar unos días disfrutando de su agradable clima. Unas jornadas sin preocupaciones ni obligaciones en donde la gastronomía también tiene un punto protagonista, sobre todo en una tierra donde el arroz y las verduras de la huerta son marca de la casa. En este caso, la ruta turística nos lleva hasta Castellón, una ciudad que no es muy popular entre los turistas, pero que hoy descubriremos sentándonos en algunas de sus mesas para darnos todo un homenaje.
La Cuina de Fernando
La primera parada la haremos en Joaquín Costa número 63. Aquí es donde se ubica este espacio culinario (@cuinafernando) donde Fernando Molina Gil y todo su equipo al frente de los fogones nos sorprenden con una gastronomía que nos lleva hasta la tradición de su tatarabuela.
Unos platos clásicos de la zona que han sabido actualizar con propuestas más contemporáneas. Sin embargo, esto no significa que no sigan usando los productos locales, emblema de la casa, y den vida a recetas como el graten de espinacas con langostinos y mallorquina, el arroz meloso marinero con fondo de marisco o su particular homenaje moderno a la ensalada valenciana. Estos y más platos los podremos disfrutar eligiendo alguno de sus menús disponibles: del día, degustación, uno especial para los sábados o el Gastro #Desoca, con un coste de 35 euros.
¡Ataula!
En el hotel Jaime I se encuentra este gastrobar vanguardista donde la comida internacional se mezcla con lo mejor de la gastronomía valenciana y el espíritu mediterráneo. Unos profesionales de la cocina, como ellos mismos aseguran, que "ponen su esencia" en cada uno de los platos que elaboran y que sirven de excusa perfecta para un encuentro casual o una cita algo más formal.
Así pues, las opciones a la hora de reservar mesa en el restaurante son muchas y variadas: desde un menú gastrotapas en forma de pequeños bocados, pasando por otro a modo degustación (con la opción de añadir maridaje) o el denominado 'ruta del sabor'. Pero si preferimos, también podemos pedir algunas de las propuestas de su carta. Da lo mismo la idea con la que vayamos a cenar, no podemos irnos de ¡Ataula! sin dar un bocado a creaciones como la alcachofa hecha causa con tiradito de corvina y aguacate; el huevo trufado con tallarines de arroz con sobrasada o la créme brulée de calabaza asada.
El arroz no podía faltar en esta ruta gastronómica por Castellón (¡Ataula!)Sopa de Lletres
El nombre de este otro espacio puede resultar gracioso para los más pequeños. El siguiente restaurante que visitaremos en Castellón es Sopa de Lletres, en el número 3 de la plaza Bucarest. Allí nos espera una gastronomía de ahora, pero con la ineludible presencia del aire mediterráneo más añejo. Es el caso de propuestas como el gazpacho de remolacha con caviar de trufa, el taco de bacalao confitado con parmentier de calabaza y verduras en tempura o el tradicional arroz a la llauna. Y si nos apasiona el postre, nada como atrevernos con su particular transición al mundo dulce.
Flote
En el número 58 de la calle Navarra de la capital castellonense se localiza Flote (@FloteRestaurant). Un local abierto todos los días, salvo los martes y la noche de los domingos. Un espacio de tonos blancos y con una clara alusión al mar que baña la ciudad. Precisamente, dicho sabor marino se refleja en los platos que ofrecen y cuyos ingredientes principales son productos frescos de temporada.
Estas son las bases de una cocina donde destacan especialidades como el calabacín con salmorejo y sepia en tres texturas, el rodaballo confitado, los calçots con romesco y trufa o la lubina con emulsión de jugo de albahaca y tirabeques. Pero como estamos en Castellón, nada como pedir un arroz meloso de jabalí, setas y alcachofa crujiente.
Propuestas gastronómicas en el espacio culinario (Flote)Relevante
Terminamos este apetecible recorrido sentados a la mesa del restaurante Relevante (@relevante_res) cuya filosofía en los fogones parte del buen hacer de Miguel Barrera. Él es el chef ejecutivo que creció (también culinariamente hablando) en el establecimiento que sus padres abrieron en la localidad de Vall d’Alba. Allí un joven Miguel empezaba a interesarse por lo que se cocía en aquellos pucheros.
Ahora, esas ideas cultivadas a fuego lento desde niño son la base de los platos que nos ofrecen en Relevante: la caballa ahumada al jugo de Oporto, la paletilla de cordero con boniato rojo y mostaza verde o el boquerón marinado con huevas de arenque. Con semejante sinfonía para el estómago nos da pena despedirnos de esta tierra. Pero no podemos irnos sin antes probar alguna delicia dulce: leche, cacao y avellanas. Uno de los postres fetiche de este espacio en la calle Moyano número 4.
Pescado de roca con moluscos y cítricos (Relevante)