Rosa Roch
Rosa Roch es redactora especializada en temas de salud, alimentación y gastronomía.
… saber más sobre el autorÚltimamente, han ganado mucha fama las obras de teatro improvisadas. En algunas ciudades de España se hacen estas obras en las que el público manda, ya que, o bien antes de entrar a la sala cada espectador escribe una frase en un trozo de papel, o bien, los espectadores participarán de forma tan activa en el espectáculo que parecerán unos actores más. Los cómicos utilizarán lo que el público escriba (o no) para ir desarrollando diferentes escenas de teatro. Se trata de obras cortas, de entre 70 y 90 minutos de duración y las risas están aseguradas.
Antes de entrar en el teatro, los participantes pueden ser los protagonistas. En algunos casos los mismos actores pedirán a los espectadores que escriban frases y las añadan en una urna, de donde irán sacando papeletas y construyendo su discurso dramático a lo largo de la obra. Este es el caso de Improshow, uno de los espectáculos de improvisación más famosos de la ciudad de Barcelona. La compañía Planeta Impro actúa cada semana de miércoles a domingo en el Teatreneu de la capital catalana. A lo largo del espectáculo los actores crean entre seis y siete historias distintas con las que divertirán, sorprenderán y emocionarán al público. La improvisación, el humor y la creatividad están asegurados.
Otra opción de teatro improvisado que existe en nuestro país se encuentra en Madrid. Corta el Cable Rojo es un espectáculo de comedia de improvisación. En este grupo de teatro los actores tienen dos facetas: improvisación y comicidad. Son capaces de crear una historia partiendo de una frase, un lugar o un personaje y darle ese toque de humor tan necesario. Ellos actúan en el Pequeño Teatro Gran Vía todas las tardes de lunes a domingo. La música, los vestuarios y los efectos de sonido (todos estos improvisados) harán de esta obra de teatro una experiencia única e inolvidable para aquellos que asistan a verla.
En ambos, el público toma un papel central, ya que, en cada una de sus actuaciones, distintas personas que estén en el patio de butacas se irán convirtiendo, por unos minutos, en actores del espectáculo. Además, cada sesión es única y exclusiva, puesto que lo que pase en cada sesión no volverá a repetirse en ninguna otra. La respuesta del público a estas obras ha sido todo un éxito, tanto Improshow como Corta el Cable Rojo han ido ganando protagonismo en sus respectivas ciudades año tras año. El público no se cansa de asistir a ellas, además, como cada sesión es totalmente nueva, los espectadores no se lo piensan dos veces cuando se trata de repetir la experiencia.
Pero, estas no son las únicas dos obras de improvisación que existen. Si navegas por internet descubrirás que estos espectáculos se hacen en muchísimos teatros, ya que existen varios grupos de improvisación y muchos cómicos de Stand Up en España.