La astrofísica Eva Villaver nos acerca a ‘Las mil caras de la Luna’
Ofrece datos científicos, pero también los misterios y leyendas que rodean a este satélite
La Luna como satélite del planeta Tierra ha acompañado siempre al ser humano a lo largo de la historia. Este año se cumple el 50 aniversario desde que Neil Armstrong la pisara por primera vez, y aunque este hecho fue todo un triunfo, la realidad es que este misterioso lugar esconde numerosos secretos, y ahora es el momento ideal para mirarla con “otros ojos”. Así lo expresa la astrofísica Eva Villaver (@villavrr), en Las mil caras de la Luna (Ed. HarperCollins Ibérica @HarperCollinsIB), que nos desvela todas y cada una de sus incógnitas de una manera amena y divulgativa.
Qué hacer por nosotros
A través de este viaje la doctora en astrofísica nos da a conocer qué es lo que hace la Luna por nosotros. Ella, como ya sabemos, provoca las mareas, pero también estabiliza el eje de rotación de la Tierra de modo que con el tiempo provoca que disminuya la velocidad de giro de esta sobre su propio eje. Por lo tanto, establece la duración de las estaciones y de la noche. “Marca los ritmos a los que se mueve la vida”, dice la autora. Además de influir en las estaciones o en la duración de los días, se cree que interviene en otros aspectos.
Su influjo en los seres humanos se sucede desde siempre a través de gran cantidad de mitos y supersticiones, y está muy vinculada a la religión. Forma parte integral de la Tierra, de su cultura, y esta perspectiva se aborda igualmente en el libro, de una forma didáctica y entretenida.
De una manera divulgativa Eva Villaver se adentra en esta percepción de la Luna abarcando todas sus caras, la científica, la cultural, la religiosa, la de los mitos o la de las supersticiones, entre otras muchas cosas.
Sobre la autora
La escritora trabaja actualmente en un estudio de cómo se están apagando algunas estrellas más comunes y de qué manera está afectando este fenómeno a sistemas planetarios como el nuestro. Además, combina esta faceta de investigadora con su actividad docente en la Universidad Autónoma de Madrid. Previamente ha estado en el Instituto Astrofísico de Canarias y en 2001 se incorporó como postdoc de la NASA en el Instituto Científico del Telescopio Espacial Hubble.
