Grandes obras de Oscar Wilde para celebrar su 119 cumpleaños
En 1895, Oscar Wilde fue condenado a dos años de prisión y trabajos forzados por ser homosexual
Oscar Wilde, que el 16 de octubre cumpliría 119 años, es considerado uno de los autores más destacados de la literatura victoriana gracias a sus innumerables obras como escritor, poeta y dramaturgo. A pesar de atravesar varias tragedias y penurias a lo largo de su corta vida, como su encarcelamiento tras ser acusado de mantener un romance con su amigo Alfred Douglas, Wilde disfrutó de una gran popularidad en la época, pues tenía una personalidad arrolladora y un aguzado ingenio.
Lamentablemente, Oscar Wilde falleció con tan solo 46 años a causa de una meningitis, consecuencia de una operación quirúrgica a la que fue sometido un mes antes. Sin embargo, su legado permanece inalterable gracias a los cuentos, los ensayos, los poemas y el resto de obras que lo convirtieron en uno de los escritores más importantes de todos los tiempos. ¿Cuáles de sus trabajos merecen tu atención con motivo de su aniversario?
El retrato de Dorian Gray
Su obra cumbre y la única novela de toda su trayectoria profesional. Como bien es sabido, cuenta la historia de un joven bello y agraciado que, tras ser retratado por el artista Basil Hallward y con el objetivo de permanecer así de atractivo, desea tener siempre la misma edad que cuando posó para el cuadro. Así, mientras él apenas cambia su apariencia, la figura retratada por Basil se deteriora y envejece, convirtiéndose en un reflejo de su alma.
El fantasma de Canterville
Este cuento de terror fue publicado en 1887 en la revista The Court and Society Review e incluido años más tarde en la colección de historias cortas El crimen de lord Arthur Saville y otras historias. En este caso, el relato sigue a una familia que se traslada a un hermoso castillo de la campiña inglesa, donde además habita el fantasma de sir Simon de Canterville desde hace más de 300 años. Haciendo caso omiso a las advertencias del anterior propietario, el cabeza de familia se burla del espíritu, empujándolo a una profunda depresión.
La importancia de llamarse Ernesto
Wilde escribió esta comedia teatral para plasmar las costumbres, la hipocresía y la seriedad de la sociedad de la época. Esta se desarrolla alrededor del protagonista, John, y su hermano fictivio Ernest. Adoptando ambos este último nombre, deciden conquistar a un par de mujeres. Sin embargo, pronto sus identidades se confunden, llevándolos a un sinfín de situaciones desternillanes y de lo más particulares.
El príncipe feliz
Y finalizamos con otro de sus cuentos más populares, la historia de un príncipe que tras morir ve a través de la estatua que levantaron en su honor las penurias que atraviesa su pueblo. Con ayuda de una golondrina que se posa cada día sobre su hombro, decide repartir entre los más desfavorecidos las joyas y el oro que adornan su traje, provocando al mismo tiempo su deterioro. Se trata de una obra educativa con la que el autor quiso enseñar a su hijo recién nacido los valores y principios éticos de ambos personajes.
