El periodista Francisco Ochoa López presentó este miércoles, 14 de febrero, en Madrid su libro ¿A ti quién te limpia los zapatos?, en el que repasa su trayectoria vital y profesional, incluyendo los años que pasó a las órdenes de Rodrigo Rato, el político del PP que pudo ser presidente del Gobierno y que, en cambio, años después fue procesado por varios delitos de corrupción e incluso acabó en prisión.
Ochoa, nacido en Madrid en 1955, estuvo en la sala de máquinas del centro derecha durante casi veinte años. Empezó como escudero de José Antonio Segurado, primero en sus cuatro años como presidente de los empresarios madrileños (CEIM) y desde 1985 a 1990 en el Partido Liberal que se coaligó con la Alianza Popular de Manuel Fraga. Precisamente una sorprendete pregunta que le hizo Segurado da título al libro: "¿A ti quién te limpia los zapatos?".
Y después estuvo doce años al lado de Rodrigo Rato, la mitad en su etapa de portavoz del Grupo Popular en la oposición al 'felipismo' desde el Congreso y la otra mitad en la Vicepresidencia económica del Gobierno de José María Aznar.
En esas casi dos décadas el periodista fue testigo privilegiado de la gestación de la alternativa del centro derecha al socialismo, de las estrategias para llegar al poder, de las luchas intestinas para suceder a Aznar, y de la decadencia de aquel Gobierno del PP, desde la famosa 'boda de Estado' en El Escorial de la hija del presidente a la "guerra insensata" de Irak.
Los 'juguetes rotos' de la política
El autor rompe con Rato en 2002 y, tras perder la carrera de la sucesión en favor de Mariano Rajoy, el exvicepresidente pasó a ser lo que denomina otro "juguete roto" de la política, que ocupó relevantes cargos (director del Fondo Monetario Internacional o presidente de Bankia), pero que le generaron un rosario de causas judiciales hasta el punto de pasar una temporada en prisión.
En el libro editado por Ópera Prima, Ochoa va desgranando sus orígenes familiares, su pasión por la música (fue crítico en varias publicaciones), sus primeros trabajos periodísticos, esas dos décadas en el núcleo del centro derecha y sus años posteriores en la dirección de Comunicación de la CEOE entre 2007 y 2011, entre otras etapas.
Pero todo escrito desde una prudente distancia, otorgando el protagonismo a un alter ego del autor y evitando citar nombres de los políticos y empresarios con los que trató en su extensa trayectoria.
