Lola Santos
Lola Santos es redactora especializada en temas de alimentación, viajes y ocio.
… saber más sobre el autorFoto: Bigstock
Jueves 29 de diciembre de 2022
ACTUALIZADO : Jueves 29 de diciembre de 2022 a las 15:21 H
6 minutos
Algunos de los edificios y construcciones que hoy podemos encontrar abandonadas por toda la geografía española cuentan una historia. A Recorremos algunas construcciones abandonadas en España.
Esta fábrica de armas se mantuvo en activo entre 1874 y 1884. La Fábrica produjo cañones, munición y hierro de gran calidad hasta la implantación de los Altos Hornos, a finales del XIX. Se estima que vivieron más de 150 familias en este emplazamiento de Irati, gracias a su capacidad productiva. Aunque está en ruinas, fue declarado Bien de Interés Cultural en 2007.
No dejamos Navarra para visitar otro Bien de Interés Cultural, el Fuerte de Alfonso XII o de San Cristóbal. Es una fortaleza militar, muy próxima a Pamplona, y fue construida a finales del siglo XIX y principios del XX.
El nombre oficial es rey Alfonso XII, ya que fue realizado bajo su reinado, como consta en la puerta de entrada. En 1929 pasa a ser penal militar, después prisión civil y, tras la Guerra Civil, cárcel política. En 1938 hubo una fuga masiva de presos: unos 800 de los casi 2.500 se fugaron. Muchos fueron devueltos al penal, otros murieron en el intento y alguno logró llegar a la frontera con Francia.
Este palacio abandonado está en la localidad madrileña de Torrelodones y cuenta con aspecto bastante tétrico, aunque tiene una situación envidiable: rodeado de naturaleza y a más de mil metros de altura. El político Antonio Maura murió aquí, bajando las escaleras. Durante la Guerra Civil, Canto del Pico fue tomado por los republicanos y fue cuartel de Indalecio Prieto, quien dirigió la Batalla de Brunete. El conde de Las Almenas, propietario de este palacio, se lo regaló a Franco.
Su estado ruinoso es debido a varios incendios y el abandono por parte de sus propietarios.
Abandonado y en ruinas, este espectacular cortijo está situado en Níjar (Almería) y fue uno de los escenarios donde se desarrolló la trágica historia que inspiró a Federico García Lorca para escribir Bodas de sangre. En 1928, el aparcero del Cortijo decidió casar a su hija Francisca Cañadas, conocida como Paca la Coja, en un matrimonio acordado que acabaría en tragedia cuando la novia se fuga con otro hombre. Los hechos fueron conocidos como el Crimen de Níjar.
El cortijo fue declarado como Bien de Interés Cultural y cuenta con una edificación de una sola planta, con estancias construidas alrededor de un patio central, con capilla, cripta funeraria, hornos, cuadras, cochineras y un aljibe bastante bien conservado.
El cortijo y su entorno han sido utilizados como plató de cine en películas como El bueno, el feo y el malo.
A orillas del río Ebro, en el escondido Valle de Manzanedo de Burgos, encontramos este monasterio, o lo que queda de él. Se trata de los restos de un monasterio cisterciense que comenzó a construirse en el siglo XIII. La desamortización, la desidia, el olvido y el expolio convirtieron poco a poco al que fue un hermoso monasterio en unas peligrosas ruinas. En la década de los sesenta la iglesia seguía en uso, prueba de ello es que en 1964 se celebró allí la última boda.
Durante la época estival se celebra la Semana de Voluntariado, donde quien quiera puede trabajar en la reconstrucción de este monasterio.
Esta construcción no llegó a usarse nunca. Se trata de un túnel de unos siete kilómetros que une Vega de Pas (Cantabria) con Pedrosa de Valdeporres (Burgos) y que iba a formar parte de la línea de ferrocarril entre Santander y el Mediterráneo.
Su construcción comenzó en los años 40 y en él trabajaron reclusos republicanos que fueron utilizados como mano de obra esclava. Las obras duraron unos ocho años y nunca fueron finalizadas del todo. Varios desprendimientos han cerrado el túnel en varios puntos, por lo que no se puede pasar de un lado a otro.
Foto: Vanbasten 23
El Palacio de los Gosálvez es un edificio abandonado de estilo francés versallesco entre Casas de Benítez, Cuenca, y Villalgordo del Júcar, Albacete. La familia Gosálvez lo mandó construir con un lujo poco habitual: baños de agua caliente con bellos azulejos, paredes con frescos, mármoles, monumentales chimeneas, obras de arte y suelos de maderas exóticas. Tras la Guerra Civil, el palacio se utilizó como maternidad y también como albergue de niños, hasta su abandono en la década de los 60. Puedes ver el estado en el que está en este video.