Lola Santos
Lola Santos es redactora especializada en temas de alimentación, viajes y ocio.
… saber más sobre el autorVamos a comenzar acotando la zona. Por el Madrid de los Austrias se conoce a la zona de la capital que abarca el primitivo trazado medieval de la ciudad y a la expansión urbanística iniciada por los monarcas de la Casa de Austria, a partir de los reinados de Carlos I y, especialmente, de Felipe II, que, en el año 1561, estableció la Corte en Madrid.
En esta zona, el Madrid antiguo, encontramos la Puerta del Sol, la Playa Mayor, el Palacio Real, el Teatro Real, la Catedral de la Almudena o la Plaza de la Villa. Sin duda, una de las zonas más bonitas de Madrid. Además, de todo ello, está lleno de curiosidades y aquí te vamos a descubrir algunas.
En la Plaza de las Descalzas está el Monasterio de las Descalzas Reales, un sitio muy recomendable en pleno Madrid de los Austrias. Fue fundado por Juana de Austria en 1559 y es un palacio de estilo plateresco. Su interior es una maravilla, repleto de tapices, azulejos de gran valor, columnas de mármol de Génova, cuadros y obras de arte del siglo XVI en adelante.
La Plaza de la Paja también se encuentra en pleno centro histórico. En los siglos XIII y XIV, era el principal centro de comercio de la ciudad hasta que la actividad se trasladó a la actual Plaza Mayor. En esta plaza está la Capilla de Nuestra Señora y de San Juan de Letrán y el jardín del Príncipe de Anglona. Muy cerca hay otro tesoro: la preciosa Parroquia de San Andrés Apóstol, una de las más antiguas de Madrid.
Este pequeño parque está situado en el barrio de Palacio y urbanizado como espacio público con un sobrio ajardinado de estilo andalusí. Está dedicado a Muhammad I de Córdoba, considerado el fundador de la ciudad («Mayrit») como enclave militar entre 860 y 880. Inaugurado en 2010, el conjunto acompaña parte del trazado de la cuesta de la Vega, a un costado de la catedral de la Almudena.
Foto: Luis GarcíaMadrid cuenta con una cúpula de enormes dimensiones, la cuarta más grande de la cristiandad. Se trata de la cúpula de la basílica de San Francisco el Grande, que mide 33 metros de diámetro. Fue levantada entre 1761 y 1784, con diseño de fray Francisco Cabezas y terminación de obra de Francisco Sabatini. Además de su maravillosa cúpula, cuenta con una gran colección de cuadros, con obras de Goya y Zurbarán, entre otros.