Clara González
Ocio
Las mejores rutas de senderismo de Asturias
Los recorridos abarcan todos los niveles de dificultad y duraciones
Ubicadas en un entorno incomparable, las rutas de senderismo en Asturias generan una forma de vida saludable tanto física como mental, especialmente para las personas mayores que buscan promover un envejecimiento activo. Además del contacto de la naturaleza, permiten conocer la cultura autóctona, la historia, y el mundo rural de lo que un día fue y permanece.
Si quieres animarte a recorrer el Principado a través de sus rutas de senderismo, aquí te traemos algunas de ellas. Continúa leyendo para saber cuáles son.
Bustio - Pendueles
Este recorrido de 21,9 km comienza en el parque de la Remansona de Bustio, Ribadedeva, y ofrece una experiencia única al conectar varios puntos de interés históricos y naturales. Desde el puerto pesquero de Bustio, el sendero atraviesa barrios como Texera y Salcea, y cruza paisajes como la Ería Nueva y un eucaliptal, para llegar a las ruinas del monasterio cisterciense de Tina. La ruta continúa bordeando el Monte Las Gurizas hasta la carretera del Faro de San Emeterio, donde se pueden visitar la Ermita de San Emeterio y el área recreativa de El Pindal, famosa por su cueva prehistórica con pinturas rupestres.
A medida que se avanza, el sendero ofrece vistas espectaculares desde el mirador del Picu de Pimiango, con panoramas del valle prelitoral, los Picos de Europa y la costa. Después de seguir caminos secundarios y cruzar el río Cabra, la senda sube a la Sierra Plana de la Borbolla y finaliza en Pendueles.
- Ubicación: Ribadedeva y Llanes (Oriente de Asturias).
- Distancia: 21,9 km.
- Dificultad: Alta.
- A pie: 6 h. 30 min. Solo ida.
Bosque de Peloño
Entrar en Peloño es como sumergirse en un túnel de vegetación y tranquilidad, dominado por un vasto hayedo que se recorre a lo largo de una pista de dieciséis kilómetros hasta llegar a la vega del Arcenorio, una amplia explanada salpicada de cabañas de pastores. El trayecto ofrece vistas excepcionales de los Picos de Europa y destaca por la capilla del Arcenorio, el Roblón de Bustiello, un imponente roble albar, y las trincheras de la guerra civil en la Guaranga. La fauna local incluye buitres, pájaros carpinteros y arrendajos, que enriquecen esta ruta de naturaleza, historia y etnografía.
- Ubicación: Ponga (Oriente de Asturias).
- Distancia: 11,3 km.
- Dificultad: Media.
- A pie: 8 h. 30 min. Ida y vuelta.
Acantilados de Pimiango
En el límite oriental de Asturias, una ruta declarada Patrimonio Mundial de la Unesco combina arte parietal, restos románicos y paisajes impresionantes. La cueva del Pindal, situada frente al mar y protegida por un encinar atlántico, alberga pinturas rupestres de entre 13.000 y 18.000 años. El sendero sigue el acantilado hasta los restos del monasterio románico de Santa María de Tina, pasando por la punta de Tina, donde Asturias se encuentra con la ría de Tinamayor. La vegetación está dominada por encinas y acebuches, y la fauna incluye aves rapaces como halcones y, con suerte, mantis religiosas en los matorrales.
- Ubicación: Ribadedeva (Oriente de Asturias).
- Distancia: 8,1 km.
- Dificultad: Baja.
- A pie: 2 h. 30 min.
Acantilados del Infierno
En esta ruta se puede admirar cómo el mar ha esculpido esculturas en las rocas a lo largo de los siglos. Entre el monte bajo, vacas y cabras, pequeñas embarcaciones de Ribadesella faenan en el Cantábrico, mientras que penínsulas verticales albergan nidos de gaviotas y cormoranes. Se destacan arcos de piedra gigantes que parecen puentes, y aves como el busardo ratonero y el cernícalo común patrullan el cielo. Al final del recorrido, en el área recreativa de Cuerres, se ofrece una vista espectacular de los Bufones de Pría, donde el agua emergente de las cuevas crea un fenómeno único en el acantilado.
- Ubicación: Ribadesella (Oriente de Asturias).
- Distancia: 5,6 km.
- Dificultad: Baja.
- A pie: 1 h. 45 min. Solo ida.
Cascada Xurbeo
A solo un kilómetro del pueblo de Murias, en el Ayuntamiento de Aller, se encuentra una de las cascadas más hermosas de Asturias, ubicada en un rincón del valle excavado por el río Negro. El entorno está cubierto por un espeso manto verde de árboles, como castaños y robles, y prados intercalados con huertos y casas ordenadas en la ladera. La ruta, que serpentea entre galerías de árboles y bosques de ribera, destaca por la arandanera negra en el sotobosque, vital para muchas aves.
Al final del trayecto, la cascada se revela en una hornacina, con su caída blanca y elegante contrastando con la piedra oscura, adornada por pequeños saltos laterales que la embellecen aún más.
- Ubicación: Aller (Centro de Asturias).
- Distancia: 1,3 km.
- Dificultad: Baja.
- A pie: 1 h. 15 min. Ida y vuelta.