El festival Boina Fest (@Boina_Fest) celebrará este sábado, 10 de agosto, su quinta edición en la localidad soriana de Arenillas para luchar contra la despoblación rural y se prevé que incrementará la población del municipio en un 1.000 por ciento.
Este festival gratuito tiene como objetivo luchar contra la despoblación con la visibilización del problema y generación de un espacio cultural para artistas de la Serranía Celtibérica y de foráneos que normalmente no tienen la oportunidad "de girar" en "una de las zonas más despobladas de España".
La cita tendrá lugar de nuevo en Arenillas, localidad del sur de Soria que lleva ya varias décadas en lucha contra la despoblación a través de la acogida de familias con hijos en viviendas municipales.
Arenillas es un municipio en constante movimiento que ha conseguido mantener e, incluso, aumentar su población hasta las 52 personas actuales, y ha cuadruplicado la tasa de natalidad de Soria debido al trabajo de su Ayuntamiento y de la Asociación Cultural de Arenillas. Actualmente, once de sus 52 vecinos son menores de edad y uno más nacerá en este 2019, con lo que los niños rozarán el 25 por ciento del total de la población actual.
Así, el festival prevé congregar a más de 500 personas, lo que implica multiplicar su población por 10, según ha informado la organización del certamen en un comunicado.
CARTEL DEL BOINA FEST
El Boina Fest arrancará el sábado a las 18.00 horas de la tarde con la actuación del portugués Djammal, que traerá un show teatral cómico-circense bajo un personaje provocador que combina su chulería con los malabares y el beat box.
A continuación, será el turno de los artistas de la Serranía Celtibérica, como el grupo soriano de pop-rock Proyecto Hermético, que presentará su último disco Hay que guardar el equilibrio; la banda de pop-punk de Ezcaray Black Luminescent, que representarán a La Rioja, y Cristosaurio con su ska mestizo en representación de Cuenca.
Tras ellos, vendrá la actuación de la "ya mítica" banda de rock madrileña Noiah, con más de 20 años y casi 300 conciertos a sus espaldas, que llevará al escenario las canciones de su último trabajo, Pulso.
Por la noche será el turno los toledanos Balkan Bomba, cabeza de cartel de esta edición, una banda que combina ska, rock y folclore de Europa del Este con los ritmos más festivos en un "espectáculo trepidante, divertido y no apto para cardiacos".
En la madrugada llegará el turno de Versionalia, una banda tributo al rock y al indie de los 80 a la actualidad, y, para cerrar el festival, se subirá a las tablas Dj Mad Coldosky, que pondrá la "guinda" a la noche.
