¿Cuál es el secreto para que los vinilos vuelvan a estar de moda?

En los últimos tiempos se está dando un fenómeno en la industria musical que ni el más avispado podría haber predicho hace 15 años: comprar vinilos es lo que más se lleva en la industria pop. Lo que parecía un producto propio del pasado y que en el presente no tenía cabida por su enorme tamaño y su dificultad para poder reproducirlo, ya que se necesita un tocadiscos y un equipo para el cuidado y limpieza del vinilo, se ha convertido en el formato analógico de reproducción de música más común entre los consumidores.

Pero, sobre todo, el principal motivo para pensar que el vinilo no iba a volver es que, desde el nacimiento de aplicaciones como YouTube o Spotify, ya no hay que pagar por oír un álbum de música, ya que tienes toda la música que deseas "a la carta". 

Sin embargo, en este difícil contexto, han vuelto a irrumpir con fuerza los vinilos, años después de que dejasen de comprarse con la aparición del CD. Y es que en 2023, las ventas de vinilos en Estados Unifos alcanzaron las 43 millones de copias vendidas, superando las ventas de CDs por segunda vez desde 1987, según Recording Industry Association of America, después de que sucediera lo mismo en 2022. En 2006, sin embargo, apenas se vendieron un millón de vinilos nuevos.

Esto ha provocado que cada vez más artistas saquen vinilos y que el precio cada vez sea más elevado. La mayoría de vinilos de éxito del mercado actualmente en España se encuentran en precios que rondan los 50 euros, a pesar de que el lanzamiento haya sido años atrás. Muchos de los artistas han aprovechado estas Navidades para lanzar por primera vez la versión en vinilo de sus álbumes, aprovechando que es época de gastar más de lo habitual. ¿Cuál es el secreto del vinilo para que ahora todo aficionado a la música quiera comprar uno?

El marketing de la nostalgia

Si algo nos ha demostrado la industria de la publicidad es que toda moda puede ser cíclica. El ser humano tiende a reivindicar el pasado como símbolo de un tiempo mejor, lo haya vivido o no, como excusa para huir de su presente. Un dato que bien conocen las empresas para saber darle valor a la estética anterior, pero con las novedades de los productos modernos, como ha sido el caso del vinilo.

Los artistas y las discográficas han optado por elaborar atmósferas en sus anuncios en los que se asocia al vinilo como elemento de tranquilidad y paz mental, acompañado siempre de algún detalle vintage que le da ese toque de "producto del pasado".

Sin embargo, no es solo la industria musical la que ha provocado esta situación, sino que empresas de otros ámbitos de trabajo lo han utilizado para ambientar sus anuncios, pero con el mismo significado que los anuncios de los artistas, por lo que han colaborado indirectamente en esta nueva "fiebre del vinilo". Por ejemplo, IKEA, lanzó un original anuncio en la que una mujer regalaba un vinilo, lo que provocó que el receptor no supiera qué hacer con él, hasta que, a raíz de ese vinilo, se le ocurrió una nueva decoración de su salón, dándole un toque más antiguo. 

Los nuevos cuadros

La utilización de los vinilos no sirve solo para darle un toque vintage a nuestro hogar, sino que su uso como elemento estético explora nuevos horizontes. En las redes sociales se ha hecho viral mostrar los vinilos como decoraciones de pared, aprovechando las nuevas portadas, que tienden a ser muy originales y coloridas. En muchas ocasiones, los usuarios nunca reproducen el vinilo que compran o no tienen siquiera tocadiscos, pero compran el vinilo para poder exponerlo.

Este factor también tiene cierto componente sociocultural, ya que sirve para mostrar al exterior el tipo de música que escuchamos. Es popular en redes sociales subir fotos en las que, bien como elemento principal o como secundario, aparecen los vinilos expuestos, para dar una imagen a los seguidores del tipo de música del que esa persona es aficionada. 

La colección perfecta

El último de los elementos que explica este regreso de los vinilos es el factor coleccionista, que, aunque ha existido siempre, ahora se ha reinventado. El diseño digital ha avanzado mucho, lo que provoca que las portadas de los álbumes hayan progresado también, creando verdaderas obras de arte como símbolo de los discos. 

Sin embargo, la verdadera novedad es el diseño de los discos de vinilo, ya que ahora suelen ser de colores, cuando siempre habían sido negros, ya que se decía que los que tenían color se oían peor. La mejora de la tecnología de creación de vinilos ha reducido este problema, dando lugar a discos de vinilo con los diseños más originales que te puedas imaginar. Por ejemplo, el EP colaborativo de Rosalía y Rauw Alejandro, RR, tiene una versión en la que el vinilo tiene forma de corazón y es de color rojo y negro. 

Los artistas han identificado esta fórmula para lanzar el mismo álbum, pero en diferentes colores, para que así los seguidores los identifiquen como elementos coleccionables. Por ejemplo, la regrabación de uno de los álbumes más reconocibles de Taylor Swift, 1989 (Taylor's Version), se presentó en 6 colores diferentes, de los cuales, el más exclusivo tenía una gaviota dibujada en el vinilo y duró en tienda solo 48 horas. Esto dio lugar a que este disco fuera el más vendido de 2023 en vinilo en todo el mundo. 

Sn embargo, no es solo algo propio de los nuevos artistas, ya que los Rolling Stones, por su parte, publicaron 43 ediciones diferentes de vinilo, esparcidas por las diferentes partes del mundo, su último álbum, Hackney Diamonds. 

Mayor accesibilidad para artistas

Desde que la música en las plataformas digitales comenzase a ganar terreno, los artistas que sacaban versiones en vinilo solían ser solamente los más exitosos y con mediación de las discográficas. Sin embargo, ahora el lanzamiento de este formato es mucho más accesible para todo tipo de artistas, lo que provoca que, incluso los que no pertenecen a ningún sello discográfico puedan lanzar sus álbumes en vinilo. 

Este hecho ha provocado que un sector de los seguidores de la música, que tradicionalmente habían sido apartados de la compra de vinilos porque sus artistas no podían producirlos, ahora hayan entrado en el mercado, convirtiéndose en consumidores también de esta nueva moda. 

Un aumento de la calidad del sonido

Si bien cada vez los altavoces de los móviles tienen una mayor calidad de sonido, siguen existiendo bastantes usuarios que prefieren la reproducción de la música de manera analógica, alegando que la calidad del sonido es bastante superior. 

Esto ha provocado que los fabricantes de los tocadiscos se hayan reinventado siendo conscientes de estas tendencias, equipando en sus equipos nuevas opciones que mejoran la experiencia del usuario, como puede ser la incorporación del Bluetooth y la capacidad para digitalizar discos, para así encontrar un equilibrio entre la nostalgia y las nuevas ventajas tecnológicas.