Ruth Macarrón
Teatro
El Ballet Nacional de Cuba presenta 'El Lago de los Cisnes' en Madrid
Llevarán a cabo seis representaciones en el mes de junio, en los Teatros del Canal
El Ballet Nacional de Cuba desembarca en la capital en el mes de junio para representar El Lago de los Cisnes, una de las obras más famosas de Piotr Ilich Tchaikovsky y del repertorio tradicional. Serán seis representaciones, entre los días 19 y 23, y se celebrarán en la magnífica Sala Roja de los Teatros del Canal, una oportunidad única para ver a la compañía de Alicia Alonso en nuestro país. Las entradas ya están disponibles, en taquilla y a través de su página web.
A esta representación se une la de el ballet La Cenicienta, con música original de Johann Strauss en los días siguientes, del 26 al 30 de junio. La obra, originalmente presentada con poco éxito en la Ópera de la Corte de Viena (Austria), fue revisada en los años 80 por el coreógrafo cubano Pedro Consuegra, e incorporada al repertorio del Ballet Nacional de Cuba a finales de los años noventa, enriqueciendo sustancialmente los aspectos técnicos y dramáticos.
El Ballet Nacional de Cuba
Creado en 1948 con el nombre de Alicia Alonso, fundadora y primerísima figura, es una de las compañías de danza internacionales más importantes del panorama artístico. Además de la intensa actividad que realizan en la isla, sus giras han llevado el nombre de la compañía por todo el mundo. Su primera figura, Prima Ballerina, directora y coreógrafa, es uno de los grandes mitos de la danza a sus noventa y siete años.
'El Lago de los Cisnes'
Estrenado por primera vez en el Teatro Bolsoi en Moscú (Rusia) en 1875, El Lago de los Cisnes está basado en un cuento de hadas con tintes románticos, una historia sobre transformaciones, encantamientos y monstruos en la que solo el amor es capaz de redimir a sus protagonistas. La música original fue compuesta por Piotr Ilich Tchaikovsky, y es el primer ballet del autor ruso. A pesar de la tibia acogida que tuvo en un principio (la crítica llegó a decir de la obra que “difícilmente se convertirá en un ballet de repertorio y nadie lo va a lamentar”), un segundo estreno casi veinte años después lo colocaron como obra cumbre en la carrera del compositor y en la historia de la danza clásica.