'Remátame otra vez', una obra al puro estilo de "Agatha Christie que interpretan los Hermanos Marx"

El Teatro Reina Victoria apuesta por los sénior en esta nueva temporada y hasta el 20 de octubre acogerán la comedia Remátame otra vez, una obra de teatro de Rodrigo Sopeña y Alberto Papa-Fragomén y producida por Carlos Sobera, que protagonizan Jesús Cabrero (59), Beatriz Rico (54), Juanjo Cucalón (62), Diana Lázaro (49) y Ángel Ruiz (53).

A lo largo de los 90 minutos que dura la obra, las risas están aseguradas, tal y como nos confirma Jesús Cabrero en una entrevista a 65YMÁS: "La acogida ha sido sorprendentemente agradable. Imaginábamos que iba a funcionar, pero hasta que no estás con el público no sabes. Son risas desde el primer minuto hasta el último segundo porque en el último momento pega un giro la función que te tienes que seguir riendo", nos cuenta el actor.

Cabrero da vida a Cristóbal Salcedo, un carismático explorador que decide invitar a su mansión a las tres personas más importantes de su vida: Camila Serrano (Beatriz Rico), una ex diva de la ópera que, además, fue amante ocasional del anfitrión, Guillermo Relincha (Juanjo Cucalón), un gran empresario del pelotazo y un gran amigo de siempre con el que Cristóbal ha entablado diversos negocios y Ágata (Diana Lázaro), a bondadosa ex mujer del explorador, cirujana y muy racional, que siempre ha bebido los vientos por él. 

Elenco sénior

Pero no estarán solos. También estará presente Jacinto (Ángel Ruiz), el fiel mayordomo de la mansión. Y lo que iba a ser una velada tranquila se termina convirtiendo en una noche para olvidar: en medio de un apagón se producirá un asesinato, que se resolverá con ayuda del más allá: "Mi mayordomo es bastante torpe, pero superentrañable, y tengo unos amigos que en realidad no los son tanto. Durante la velada comenzarán a salir los trapos sucios de todos los personajes, y hasta el último segundo no sabes quién ha sido el asesino", adelanta.

Pentación Espectáculos

"El público hay momentos donde no te deja seguir por la risa o rompen en aplausos. El ritmo es trepidante. Piensas que lo tienes claro, y de repente hay una vuelta de rosca. Es un caso que parece escrito por Agatha Christie, pero la representan los Hermanos Marx. Es una locura divertidísima", asegura Cabrero.

Una locura que ellos mismos ya intuían mientras ensayaban, aunque Cabrero confiesa que todo depende del público "que va marcando el ritmo y la velocidad". 

El directo del teatro

Si algo tiene de especial el teatro es el "riguroso directo". "Nosotros estamos arriba sintiendo como respira la gente y eso no marca a nosotros los tempos. No los ves porque no focalizas, pero el riguroso directo nos mantiene una tensión bonita. El día que no te pongas nervioso, habrá que cambiar de profesión", opina el actor.

Porque para él y para el resto de sus compañeros entretener al público es su único objetivo cuando se meten en la piel de estos personajes tan variopintos: "Tienes una gran responsabilidad de hacerlo bien para justificar que el precio de la entrada ha merecido la pena. Esta responsabilidad hace que haya una gran comunidad con el público y hace que ría y llore contigo. Esto es lo que hace único al teatro".