Eurovisión 2019, cómo ha cambiado la participación española

El concursante de la pasada edición del programa Operación Triunfo ha sido el elegido por el público para viajar hasta Israel con el tema La venda, una canción alegre, optimista y desenfadada compuesta por Adriá Salas, vocalista del grupo La Pegatina. Con su canción, Miki espera poner a bailar a toda Europa y recoger el legado de grandes artistas que han representado a España en ediciones anteriores con mejor o peor suerte.

Y es que con sus 63 años de historia, el festival de Eurovisión sigue congregando a millones de espectadores frente a la pantalla de la televisión o, en los tiempos actuales, del ordenador.

Un poco de historia sobre Eurovisión

España participó en el festival por primera vez en su cuarta edición, en 1961, con Conchita Bautista cantando Estando contigo. A partir de entonces, han acudido a Eurovisión cantantes y compositores de prácticamente todos los estilos musicales, desde baladas como La Fiesta terminó interpretada por Paloma San Basilio, hasta Quédate conmigo de Pastora Soler, Nacida para Amar, de Nina, o Amanecer, de Edurne. Tampoco han faltado los ritmos más cañeros y con algún guiño flamenco. Azúcar Moreno, Peret o la Década prodigiosa son solo algunos ejemplos.  Canciones curiosas, como el Chiki Chiki, de Rodolfo Chiquikilicuatre, o el Bloody Mary de Las Ketchup, también fueron de las canciones más pegadizas, sin importar demasiado el puesto en el que quedasen.

50 años del último triunfo español

En cuanto a los triunfos de España, no son demasiados pero ahí están. Massiel, con su La La La, primera ganadora en 1968, y, un año, después, Salomé y su famoso Vivo cantando (¡hey!), que volvió a ganar cuando el festival se celebraba en Madrid. La lista de triunfos absolutos en Eurovisión no es muy extensa, pero hemos quedado en los primeros puestos en numerosas ocasiones con cantantes y grupos como Karina, Mocedades, Betty Missiego o Sergio Dalma.

Ahora le toca el turno a Miki Núñez  y La venda una canción actual, pegadiza y divertida, algo que siempre se agradece. Por cierto, ya en 1977 pisó el escenario de Eurovisión otro Micky, que quedó noveno con su Enséñame a cantar. El 18 de mayo, veremos qué ocurre.