Mariola Báez
Televisión
Colombo, Kojak, McCloud y otros grandes detectives, ¿cuál era tu favorito?
Personajes de ficción que ya forman parte de la historia de la televivisón y de toda un generación
Durante la década de los 70 fueron muchas las series policiacas o de detectives que cada tarde o noche miles de espectadores seguían con interés. Tal vez fuera por el número limitado de canales de televisión existentes, pero, en su momento, todos aquellos protagonistas, únicos y muy distintos entre sí, alcanzaron altísimas cotas de popularidad, aunque cada uno de nosotros tuviese su preferido.
De los despistes de Colombo a la sofisticación de Banacek
Sin duda, particular como pocos era el teniente Colombo. A aquel detective de de Los Ángeles, de perenne gabardina, al que daba vida el actor Peter Falk, no había detalle que se le escapase. Sabíamos desde el principio quién era el “malo” (algo totalmente novedoso en una serie de este tipo), pero eso era lo de menos. Lo divertido era ver cómo Colombo lo iba acorralando con sus preguntas de última hora, aparentemente inocentes, y conseguía que el culpable (que se creía mucho más listo que él) confesase su crimen. Probablemente fue el detective más popular de los 70, con su estilo inconfundible, muchas veces cigarro en boca, su voz ronca y rasgada, su Peugeot algo destartalado (curioso ver un coche europeo en una serie americana) a veces con su perro y siempre hablando de la señora Colombo, aunque nunca se la viese… Colombo no dejaba indiferente y comprobar cómo sus aparentes despistes acababan sacando de quicio al astuto asesino, nos encantaba.
Muy distinto era el carismático Kojak, detective interpretado por Telly Savalas, que cambió sus cigarrillos por chupachups, en los cinco años de emisión de la serie en España (1973 – 1978). El teniente Teo Kojak, fue uno de lo primeros personajes televisivos en lucir calvicie con total naturalidad. Socarrón, incisivo y capaz de pararle los pies al delincuente más osado, el inspector de Manhattan marcó estilo demostrando su agudeza y "chulería" a la hora de acorralar, con métodos propios, a cualquier criminal que tuviese la “suerte” de caer en sus manos.
Si hablamos de estilo, nadie como Banacek para resolver los casos más difíciles "sin despeinarse". George Peppard, antes de ser el jefe de El Equipo A, interpretó a este singular (y guapísimo) detective, en los inicios de los 70. Banacek era requerido, preferentemente, para resolver casos de robos de “lujo”,que incluyesen joyas, obras de arte o grandes mansiones desvalijadas por malvados amigos de lo ajeno (ya lo decía Pepe Da Rosa… “me han robado en el chalé… que venga Banaché").
En la lista de policías y detectives “originales” no puede faltar McCloud. El actor Dennis Weaver fue el encargado de llevar a la pequeña pantalla las aventuras de este cowboy urbano, procedente de Nuevo México, que, a pleno galope en su caballo por las calles de Manhattan y dándole más de un disgusto a su jefe, resolvía casos de todo tipo durante los siete años que estuvo en antena (del 70 al 77).
¿Y detectives mujeres?
También tuvieron su protagonismo, a veces como apoyo fundamental del protagonista, como ocurría en la popular McMillan y su esposa, protagonizada por Rod Hudson y Susan Saint-James, o como verdaderas pioneras en el campo de la investigación policial. Como ejemplos, dos series de la época que rompieron moldes: La mujer policía con una magistral Angie Dickinson y la exitosa Se ha escrito un crimen, en la que la escritora Jessica Fletcher (Angela Lansbury), traspasaba el mundo de ficción cuando su inteligencia e intuición eran requeridas para resolver un asesinato real.