El reencuentro de los actores de Friends y la última temporada de Sexo en Nueva York –que aún no se ha estrenado– son dos momentos emocionantes que los fans de las exitosas series de los 90 llevaban años pidiendo. Sin embargo, junto a la nostalgia por ver juntos de nuevo a estos rostros tan conocidos y queridos, el regreso de ambas historias neoyorkinas también ha servido para ver el efecto del paso del tiempo entre los actores y actrices a los que llevábamos años sin seguir la pista. Algunos de ellos han aparecido con canas y arrugas propias de la edad. En cambio, los que han intentado tapar el proceso del envejecimiento con "excesivos" retoques estéticos han llamado más la atención entre los espectadores.
Los fans esperan ansiosos el estreno de And Just Like That…, la séptima temporda de Sexo en Nueva York y una imagen del rodaje no ha pasado desaparcibida.
Han pasado 17 años de la emisión del último capítulo de la serie. De las tres protagonistas de Sexo en Nueva York –Kim Cattrall, Samantha Jones en la ficción, no participará en este remake–, Cynthia Nixon, que interpreta a la abogada Miranda Hobbes, tiene 55 años y no tiene reparo en mostrarse al natural y sin pretender aparentar otra edad.
Sarah Jessica Parker compartió esta foto, tomada el primer día de rodaje, en Instagram. En la imagen vemos que el cabello de Nixon luce la técnica 'grey blending', basada en mezclar las canas con el resto de la melena, en lugar de intentar taparlas. En esta misma línea, se mostró la gran protagonista de la Gran Manzana a sus 56 años. Parker, Carrie Bradshow en la serie de HBO, sí que ha pasado por el quirófano y lleva algún que otro retoque, pero el resultado es de lo más natural. No ha perdido su identidad ni la expresión. Igualmente, parece que la actriz ha optado por dejarse las raíces del cabello blancas.
Por otro lado, Kristian Davis (56 años) destacó en la foto por lucir un rostro con evidentes retoques estéticos. Los usuarios de Instagram no pasaron por alto este detalle: "¿Qué te ha pasado, Charlotte?", exclamaba uno; "Kristin es muy guapa. No necesita todo ese bótox ni filtros", dijo otro.
La vuelta del grupo de amigos más querido de la televisión también ha dado de qué hablar. Más allá de las críticas edadistas que han recibido en Internet –resulta que hay gente que piensa que dos décadas no deben notarse–, lo cierto es que solo con ver el cartel promocional, más que un episodio de Friends parecía un anuncio de una clínica de cirugía estética.
Al igual que las amigas neoyorkinas, los protagonistas de Friends han aparecido 17 años después de la emisión del último capítulo. En este caso, no ha sido para volver a interpretar a los míticos colegas que frecuentaban el 'Central Perk', sino para reunir a todos los actores en un capítulo especial llamado Friends: The Reunion donde recuerdan su paso por la maravillosa serie que nos alegró la vida durante diez temporadas (1994-2004). Así es como lucen ahora:
Lisa Kudrow (57), que interpreta a la excéntrica Phoebe, se sometió a una operación de cirugía estética con 16 años: se hizo una rinoplastia para enderezar su tabique nasal. A pesar de lo contenta que quedó la actriz con el resultado, en una entrevista para The Saturday Evening en 2013 confesó que siente miedo hacia los tratamientos de bótox y rellenos faciales y asegura que esa fue la única vez que acudió a los retoques estéticos. "Creo que todos somos guapos cuando sonreímos, entonces simplemente trato de ser feliz", dijo.
Matt LeBlanc (Joey Tribbiani), a sus 53 años, es el que más críticas ha recibido por su físico, pero no por haber acudido al bisturí, sino por el aspecto natural que refleja con el paso del tiempo: canas, unos kilos de más y sin rastro (aparentemente) de retoques.
Sin duda, Courteney Cox (Monica Geller), a sus 56 años, es la que más ha querido luchar contra los efectos de la edad. Hace 4 años, la actriz reconoció a la revista People que se arrepentía de sus excesivos retoques estéticos: "No me di cuenta hasta que un día di un paso atrás y me dije: "Cielos, no parezco yo", admitió. Actualmente, asegura que continúa combatiendo el envejecimiento, pero de manera más natural. "Sigue habiendo cosas con las que no estoy contenta, pero ahora trabajo en ellas para aceptarlas y cambiarlas si puedo". Los espectadores se han sorprendido al ver la imagen de la maniática del orden y de la limpieza en la ficción, asegurando que su cara ha perdido su esencia.
Matthew Perry (51), actor que da vida a Chandler Bing, comenzó a llevar una vida de excesos durante el éxito de la serie. El miedo a fallar y la exigencia le condujeron a caer en las adicciones. Estuvo más de una vez ingresado en un centro de rehabilitación por su adicción a los opiáceos, anfetaminas y alcohol. A pesar de estar ya recuperado, durante el rodaje de la serie vivió un infierno, tal y como él mismo ha reconocido, y no se acuerda de nada de los últimos capítulos. Esto le pasó factura, y en el reencuentro se muestra poco participativo, pero lo que sí parece evidente es que más de una vez se ha sometido a retoques estéticos.
De todos los compañeros, Jennifer Aniston (52) es la más popular. Tras su paso por Friends, la actriz ha seguido teniendo éxito tanto en la pequeña como en la gran pantalla y, por tanto, no la hemos perdido de vista. Además, es la que mejor ha sabido disimular los últimos 20 años a golpe de bisturí. Sí, Rachel Green (su papel en la serie), mantiene su estupendo físico a base de una buena dieta y ejercicio físico, pero también ha echado mano del bótox y el ácido hialurónico.
David Schwimmer (Ross Geller) tiene 54 años y siempre había destacado entre el grupo de amigos por ser uno de los rostros más naturales. Sin embargo, este reencuentro ha despertado las sospechas entre los fans, quienes sostienen que su cara no parece tan intacta como antes.
