Olga Selma
Olga Selma es redactora especializada en temas de salud, alimentación y consumo.
… saber más sobre el autorSu suave clima mediterráneo, su gastronomía y su riqueza cultural convierten a Valencia en un lugar perfecto para disfrutar de unos días de descanso. A una hora de la capital, encontramos variadas e imprescindibles visitas para pasar una agradable jornada, tanto si buscamos destinos de costa como de interior. Lugares emblemáticos y llenos de encanto.
Esta bonita villa turolense, declarada Conjunto Histórico, ha conservado su trazado urbano medieval, incluidas parte de las murallas y de los antiguos portales de acceso. Sobresalen dos magníficos ejemplos de la arquitectura gótica: la excolegiata de Santa María la Mayor y el impresionante castillo de los Fernández de Heredia, aunque durante la excursión podemos merece la pena pasear por todo su casco antiguo.
Su clima de temperaturas suaves y sus 20 km de playas de fina arena y rocosas calas la convierten en una encantadora ciudad donde el sol brilla casi todos los dás del año. Dènia ofrece playas, pero también cultura y, sobretodo, una deliciosa gastronomía como Ciudad Creativa de la gastronomía por la UNESCO que es: gambas rojas, pescado fresco, paellas y la cocina con estrella Michelin de Quique Dacosta se encuentran entre las propuestas gourmet de Dènia.
Se la conoce principalmente por albergar la ciudad de vacaciones Marina d’Or, pero Oropesa del Mar ofrece al visitante muchos otros atractivos con sus 12 km de costa y 7 playas que se distinguen, principalmente ,por su diversidad y por la pureza de sus aguas que combinan espacios naturales de arena y roca. Una de las principales cosas que hacer en Oropesa del Mar es pasear por su tranquilo y cuidado centro histórico, situado alrededor de las ruinas del castillo. También merece la pena recorrer la Vía Verde del Mar, que trascurre entre las localidades de Oropesa del Mar y Benicàssim, discurriendo por el antiguo trazado ferroviario de la línea del tren que bordeaba el litoral de ambas poblaciones.
Chulilla es una población de gran belleza situada a 60 kilómetros de la ciudad de Valencia. El Monte del Castillo es el núcleo original de la villa, en el que se conservan las murallas de la antigua fortaleza y sus típicas casas blancas de teja árabe, emplazada ssobre una pronunciada pendiente coronada por el Castillo, lo que conforma una de las estampas más pintorescas y bellas de los Serranos.
Sagunto tiene dos núcleos principales: el casco antiguo, situado a los pies del castillo y el teatro romano, y el Puerto de Sagunto, a 5 km del centro histórico. Un paseo por el centro histórico nos permitirá conocer los vestigios de siglos pasados, lo que es todo un viaje en el tiempo. Pero además, la población ofrece más opciones a parre de la rica oferta cultural, como sus senderos de montaña y sus 13 kilómetros de costa con múltiples opciones para el disfrute y la relajación.