Los barrios marineros con más encanto de España

Con la llegada del buen tiempo, a muchos nos apetece volver a visitar nuestras queridas playas. Existen pedazos de nuestra geografía que conservan barrios marineros de antaño, llenos de encanto e historias por descubrir. 

La Barceloneta

El barrio marinero de Barcelona es un lugar excelente para perderse entre sus calles y sus edificios erosionados por el salitre del mar. Su historia se remonta al año 1719, cuando se realojan los habitantes del barrio donde el rey Felipe V mandó construir La Ciudadela. A pesar de las remodelaciones que experimentó la ciudad durante los Juegos Olímpicos de 1992, La Barceloneta todavía conserva su tradicional aspecto pesquero y su encanto mediterráneo. 

Hondarribia

En la ciudad de Hondarribia, a 23 kilómetros de San Sebastián, encontraremos el barrio de la Marina. El barrio nació fuera de las murallas de la ciudad, dónde no había sitio para los pescadores. La zona ha experimentado numerosos cambios, pero las balaustradas de los balcones todavía conservan las pinturas que se empleaban en el mantenimiento de los barcos que constituían la flota pesquera tradicional de la localidad.

Villajoyosa

El casco antiguo de Villajoyosa, en Alicante, es uno de los más curiosos. Las casas de los pescadorestienen diferentes colores, porque a veces llegaban tan confundidos del mar que no recordaban cuál era la suya. Actualmente se ha convertido en todo un reclamo turístico gracias a su estupenda ubicación y a sus magníficas playas, sin embargo, no ha perdido un ápice de su identidad tradicional y ha conseguido salvaguardar su vocación marinera. 

El Cabañal 

El Cabañal es uno de los barrios marineros del distrito Poblats Marítims (Poblados Marítimos) en Valencia. En sus calles frente al mar, los pescadores llevaban a cabo su famosa “pesca del bou”, dónde estos animales se encargaban de arrastrar las barcas. Su aspecto muestra un contraste perfecto entre tradición y modernidad, ya que el mar se entremezcla con los colores y los antiguos edificios modernistas, con unas fachadas que son una auténtica joya. 

La Viña

El barrio gaditano es capaz de resumir siglos de historia entre sus calles. Fue un importantísimo punto de comercio de la ciudad de Cádiz con las Américas en el siglo XVI, motivo por el que muchos pescadores se instalaron el este barrio amparado por la playa de la Caleta. Sus casas sencillas y erosionadas por el mar y el paso del tiempo son una excelente muestra de un típico barrio marinero en el que pasear por sus calles y disfrutar del sol o de un buen “pescaito frito” es un auténtico placer.