¿Cuáles son las mayores cuevas visitables de España?

En España se pueden encontrar multitud de cuevas por toda su geografía, muchas de ellas visitables por todo tipo de público, que pueden disfrutar de impresionantes excavaciones en lo más profundo de la tierra. Repasamos algunas de las mayores de todo el país.

Cuevas de Nerja, en Nerja, Málaga

Descubre la vida prehistórica en el mundo subterráneo de la Fundación Cueva de Nerja. Con una extensión de casi 5 kilómetros, las cuevas son una larga serie de cavernas que constan de ocho habitaciones y dos entradas principales. Recorre el vestíbulo principal para ver artefactos humanos y restos encontrados en las cuevas. En la cámara del Colmillo de Elefante, podrás admirar las impresionantes formaciones de estalactitas y estalagmitas. También puedes asistir a un concierto en el anfiteatro natural de 600 asientos de la sala Cascade. Se puede acceder a las cuevas en coche o autobús, pero un paseo relajante por la costa es otra forma de volver a Nerja. 

Cuevas del Drach, en Porto Cristo, Mallorca

Puedes hacer una visita debajo de la tierra en la isla mallorquina para ver uno de los lagos subterráneos más grandes del mundo en Cuevas del Drach. Las cuatro cuevas se encuentran a 25 metros bajo tierra y se extienden 2,4 Km. Quedarás maravillado con las impresionantes formaciones de estalactitas y estalagmitas que adornan los pisos y techos de las cuevas. Y también tienes la posibilidad de una visita guiada por las cuevas, que incluye un paseo en bote por el lago Martel y termina con un concierto clásico en vivo de cuatro piezas. Los caminos pueden ser bastante empinados y resbaladizos, así que asegúrese de usar buenos zapatos para caminar.

Cueva de los Verdes, en Lanzarote

En esta cueva puedes quedar maravillado ante las formaciones rocosas inusuales en un caleidoscopio de colores en un recorrido por la Cueva de los Verdes, un sistema de cuevas volcánicas. Su formación es el resultado de la actividad eruptiva del volcán La Corona hace unos 3.000 años, que creó un túnel subterráneo. Escuchando a la guía explicar la geología inusual de la cueva, conocerás cómo ha servido de escondite y revelar su secreto especial. La cueva de un kilómetro tiene pisos irregulares, muchos escalones y techos bajos. Puede no ser adecuado para personas con problemas de movilidad. Se recomiendan zapatos sensibles.

Cueva del Viento, en Icod de los Vinos, Tenerife

El complejo subterráneo Cueva del Viento-Sobrado es el tubo de lava más grande de Europa, y el quinto más grande del mundo, detrás de una serie de tubos de lava en Hawai. También se considera el tubo volcánico más complejo del mundo, debido a su morfología de varios niveles y pasajes. Fue creado por los flujos de lava del Pico Viejo, al lado del Teide.

La cueva se encuentra en la población de Icod de los Vinos, en el norte de la isla de Tenerife, se extiende más allá y contiene tres niveles diferentes de pasadizos, cada uno lleno de fenómenos geomorfológicos como pozos de lava y terrazas, rico en fósiles de la "megafauna canaria". Aquí se han descubierto huesos de Gallotia goliat y Canariomys bravoi, un lagarto y rata gigante extinto, respectivamente. En varias entradas del sistema de tubos se encontraron restos arqueológicos pertenecientes a los guanches, los antiguos habitantes bereberes de las Islas Canarias. En la actualidad, la Cueva del Viento es una atracción turística de la isla.

Cueva El Soplao, en Celis, Cantabria

En esta cueva puedes ver sus helictitas, estalactitas inusuales por la forma en que desafían la gravedad, y láminas de calcita que en muchos casos parecen translúcidas. Un tren te lleva a través de la entrada de la cueva a sus cámaras principales. Después continuarás a pie por los túneles y las diferentes "habitaciones" para ver las maravillosas formaciones que contienen. El tamaño de la gran Galería Gorda debería hacerte sentir pequeño en la comparación. En la Galería del Bosque, las columnas de estalactitas y estalagmitas unidas crean la apariencia de un bosque. Si eres más aventurero, haz un recorrido más largo: se proporcionan faros, monos y botas de goma.

Barranco de Guayadeque, Gran Canaria

El Barranco de Guayadeque es un acantilado lleno de plantas indígenas y cuevas naturales originalmente asentadas por pioneros en la isla. Puedes visitar el museo para ver muchos de los artefactos que dejaron. También tienes la posibilidad de conducir o tomar un autobús turístico para ver las cuevas, muchas de las cuales todavía están habitadas hoy, aunque ahora están conectadas a la electricidad. Algunos de los residentes pueden incluso invitarte a entrar. Un restaurante en el acantilado ofrece comida tradicional canaria como cerdo frito, papas hervidas preparadas tradicionalmente y vino local.