Descubre estos 4 pueblos de Girona para pasar el verano

Girona es una de las ciudades más visitadas de Cataluña por turistas de todas las partes del mundo. En su entorno natural, el ambiente que se respira y la oferta cultural que ofrece encontramos algunas de sus razones. Sin embargo, no son las únicas.

Ahora que llega el buen tiempo, os proponemos cuatro opciones para disfrutar de una visita a algunos de otros lugares perfectos de toda la provincia.

Cadaqués

El principal atractivo de Cadaqués es que es uno de los pocos pueblos pesqueros que hay en la zona. La mayoría de sus habitantes vive todavía del mar, por lo que en nuestra estancia será posible conocer de primera mano el funcionamiento tradicional de esta industria.

Merecerá la pena desplazarse a algunas de las calas más famosas de la Costa Brava, como la Cala Guillola o Sa Sabolla, ambas de fácil acceso. Además del barrio judío, la iglesia de Santa María o la Casa Blaua.

Tossa de Mar

Su carácter medieval hace de Tossa de Mar uno de los rincones con más encanto de la Costa Brava. Una de las visitas obligadas será el Castillo de Tossa, que todavía conserva las murallas y la gran mayoría de detalles medievales de la época. Pese a que las calas, en su gran mayoría, no tienen un fácil acceso, ocurre lo contrario con la playa. Perfectamente accesible a pie desde cualquier punto del paseo marítimo.

Pals

Si estás buscando un pueblo medieval en Cataluña y ya has disfrutado de Tossa de Mar, Pals es una de las mejores opciones por las que puedes optar. Ofrece un importante patrimonio histórico y artístico, pero si tenemos que destacar una obra por encima del resto es La Torre de las Horas. El único resto del antiguo castillo que fue derruido durante la Guerra Civil.  

Peratallada

A 30 kilómetros al este de la costa se encuentra Peratallada. Como si se tratara de un viaje en el tiempo, en nuestra visita a esta localidad podremos recorrer su casco antiguo y disfrutar de la Plaza del Castillo o de la Plaza de les Voltes, dos de sus principales atractivos. El ambiente que se respira en Peratallada hacen de él la ocasión perfecta para desconectar de la ciudad y sumergirse en un entorno completamente natural.