Las Cuevas del Águila: uno de los patrimonios geológicos más importantes de Ávila
Se sitúan en pleno Valle del Tiétar, en Arenas de San Pedro, y destacan por sus curiosas formaciones
Las Cuevas del Águila constituyen uno de los patrimonios geológicos más importantes de Ávila, en pleno Valle del Tiétar. Ubicadas en el municipio de Arenas de San Pedro, se hallan a 50 metros de profundidad en el llamado Cerro de Romperropas o Cerro del Águila, de ahí su nombre, y poseen una extensión visitable de 1.000 metros. No son muy grandes, pero se encuentran muy bien conservadas y poseen formaciones singulares que se resaltan gracias a una iluminación cuidada especialmente.
Descubiertas por casualidad
Las cuevas fueron descubiertas por casualidad. Un grupo de chavales de la localidad estaba merodeando por la zona la noche del 24 de diciembre de 1963. De pronto observaron cómo por un agujero del cerro salía vapor. Sintieron curiosidad y con cuerdas y linternas descendieron por un hueco que medía 60 centímetros. Estuvieron gateando por este espacio durante unos 50 metros hasta que alcanzaron la bóveda principal. Se perdieron alrededor de cinco horas hasta que volvieron a encontrar el punto de entrada y pudieron salir. Después dieron a conocer su descubrimiento.
Transcurrido casi un año después, el 8 de julio de 1964 las Cuevas del Águila se abrieron al público y hasta la fecha actual se pueden visitar todos los días.
Trayecto sencillo
Es un trayecto corto, y de fácil acceso. El recorrido se hace en unos 40 minutos y hay vistas cada media hora siempre con un vigilante. En un principio hay que pasar por un camino pavimentado y para salvar los desniveles hay que cruzar unas escaleras. Predominan las estalactitas y estalagmitas de distintos colores y formas de modo que cada uno puede ver todas las figuras que su imaginación le quiera proporcionar.
La temperatura del interior de las cuevas es de 17ºC y es estable durante todo el año, con una humedad cercana al cien por cien. Los expertos no han podido determinar con exactitud sus orígenes aunque por su geología estiman que puede tener de 500.000 a 1 millón de años. Es fruto de las corrientes de agua subterráneas de la zona, mientras que las filtraciones de la lluvia son las responsables de los distintos espeleotemas o formaciones de la cavidad.
El lugar en el que se sitúan las Cuevas del Águila, el Valle del Tiétar, está repleto de rutas de senderismo, y de infinidad de parajes para disfrutar de todas las opciones que aporta el turismo rural.
