Victoria Herrero
Viajes
Hoteles sorprendentes en los que pernoctar al menos una vez en la vida
Victoria Herrero
Lunes 18 de noviembre de 2019
ACTUALIZADO : Lunes 18 de noviembre de 2019 a las 6:09 H
4 minutos
Alojamientos donde podrás dormir dentro de una peculiar montaña o en una construcción hecha de sal
Cuando uno rastrea Internet o acude a una agencia de viajes para reservar un hotel, el establecimiento tiene que cumplir unas premisas. Precio, localización, servicios y buenas críticas son algunos de los aspectos en los que nos fijamos para decantarnos por uno u otro alojamiento. Sin embargo, nadie se ha parado a pensar en si las habitaciones de dicho hotel nos recuerdan a una montaña o si cuentan con una arquitectura cuanto menos peculiar.
Este es el caso de estos tres alojamientos sorprendentes que merece la pena visitar al menos una vez en la vida.
Montaña Mágica Lodge (Chile)
Si vamos a la Patagonia chilena es imprescindible visitar este alojamiento de ecoturismo construido en el mismo interior de una montañana. Para conocerlo, basta con acercarse a la Reserva Natural de Huilo-Huilo. Allí nos toparemos con este hotel construido con materiales de la zona como si de una montaña se tratara. Todo un laborioso trabajo realizado por las comunidades cercanas de Neltume y Puerto Fuy, donde abunda la madera. Un paraíso de 12 habitaciones y con capacidad para menos de medio centenar de huéspedes que hará las delicias de todo aquel que sueñe con descansar en mitad de este paraje natural. ¿Lo mejor? La cascada de agua que cae desde la parte más alta de este hotel-montaña.
Southern Ocean Lodge (Australia)
Llama la atención la arquitectura de este hotel que sorprende, ya no solo por unas suites dispuestas una tras otra como si de un tren se tratara, sino por el hecho de que está ubicado en lo alto de un acantilado en la Isla Canguro, al sur de Australia. Un rincón perdido donde su verdadero tesoro es su importante flora y fauna. Famosa por su miel, esta isla tiene el santuario de abejas más antiguo del mundo.
Pero no vamos a hacer tantas horas de vuelo hasta Australia para ver a estos pequeños insectos, sino para poder alojarnos en una de las maravillosas habitaciones cuyas cristaleras –especialmente en los baños– hacen que nos quedemos absortos viendo la belleza del Océano Índico. Y todo desde la comodidad de la bañera.
Palacio de Sal – Uyuni (Bolivia)
Nos detenemos ahora en un hotel algo más modesto que el anterior pero no por ello menos especial y mágico. No hace falta más pistas para adivinar de qué está construido este alojamiento: de sal. No podía ser de otra manera si se encuentra a orillas del Salar de Uyuni. Un lugar único de un blanco inmaculado y que atrae a numerosos turistas a este rincón del altiplano boliviano. Como se puede observar en la imagen, hasta el techo de las habitaciones muestra el delicado trabajo a base de miles y miles de bloques de sal. En concreto, un millón se contabilizaron para este proyecto que surgió en 1998 con la idea de Juan Quesada Valda en este espacio –el mayor desierto de sal del mundo– a más de 300 kilómetros de La Paz.