Olvera, un pequeño pueblo de la provincia de Cádiz, ha sido elegido la Capital del Turismo Rural 2021 con 21.794 votos por los usuarios de Escapada Rural (@escapadarural), de entre las 247 candidaturas de este año.
La plataforma, que celebra el concurso anualmente, destaca el éxito de participación en esta quinta edición en la que ha alcanzado la cifra de 120.781, superando en un 28% las votaciones del 2020. De esta forma, el municipio gaditano se convierte en el sucesor de Potes, la localidad cántabra ganadora en 2020 y se impone a los otros 9 pueblos que aspiraban a hacerse con el título, quedando el resto del ranking en el siguiente orden, de más votado a menos: Daroca (Zaragoza), Yeste (Albacete), Taramundo (Asturias), Cuacos de Yuste (Cáceres), Aia (Guipúzcoa), Chelva (Valencia), Sepúlveda (Segovia), Ortigueira (A Coruña) y La Baronia de Rialb (Lleida).
Parada obligatoria en la Ruta de los Pueblos Blancos
Nada más llegar a Olvera, el viajero contempla las casas encaladas y empinadas que tiñen de blanco el paisaje de la Sierra Norte de Cádiz y los campos de olivos que lo rodean, un elemento distintivo del conjunto de municipios que pertenecen a la Ruta de los Pueblos Blancos.
Si a esto le sumamos la espectacular Iglesia con sus dos torres gemelas, junto con la imponente torre defensiva, se crea una imagen sensacional, que además puede ser la fotografía más famosa de los Pueblos Blancos de Cádiz.
Conjunto Histórico-Artístico en 1983
No se equivocaba el poeta Joaquín Romero Murube cuando decía "Olvera es una calle, un castillo y una iglesia, ¡pero, qué calle, qué iglesia y qué castillo!". El pueblo fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1983 por sus magníficos edificios. En la Plaza de la Iglesia, nos topamos con La Parroquia de Nuestra Señora de la Encarnación, una construcción neoclásica que los duques de Osuna mandaron erigir en el siglo XVIII y que culminó en 1843, después del derribo en 1822 de la antigua Iglesia Mayor, de la cual solo se conserva un ábside. Su fachada destaca por sus dos torres gemelas, mientras que en el interior nos podemos deleitar con sus tres naves bajo bóvedas de cañón y construidas con materiales tan apreciados como el mármol italiano.
Igualmente, su castillo árabe de finales del siglo XII que se ubica en una roca en el lomo de una colina, es otro de sus encantos. La torre del homenaje es el elemento principal de esta arquitectura defensiva, la cual se alza en la parte sur del recinto.
A su vez, pasear por sus calles es un auténtico viaje al pasado. Este pueblo ha pertenecido durante años a la frontera y esto se puede ver en la estructura urbana del municipio. Dicho esto, algo imprescindible que todo turista debe hacer es caminar por el barrio de la Villa, el más antiguo del municipio, cuyas callejuelas estrechas y curvas situadas alrededor de las murallas forman un laberinto que te traslada 700 años atrás, a la época de la Olvera árabe.
Punto de partida de la Vía Verde de la Sierra
Otro dato interesante es que Olvera es el punto de partida de la ruta de la Vía Verde de la Sierra, la única declarada de interés turístico en Andalucía. Justo comienza en la antigua estación de tren y, después, esta vía verde serpentea a través de 36 kilómetros entre la Sierra de Cádiz y la Sierra Sur de Sevilla. Al igual que otras Vías Verdes de España, esta lleva a los amantes de la naturaleza a lo largo del antiguo ferrocarril que solía conectar Jerez y Almargen, en la provincia de Málaga.
Riqueza gastronómica
En cuanto a su riqueza gastronómica, destaca la sopa pegá, un plato típico de la localidad que, realmente, más que una sopa parece una tortilla hecha a base de pan y rellena de espárragos. La sopa de tomate, el solomillo rellena y la pajarilla en salsa son otras recetas características de Olveraí que no puedes irte sin probar.