Teresa Rey
Viajes
Descubriendo algunos de los pueblos más antiguos de España
Teresa Rey
Foto: Bigstock
Viernes 25 de diciembre de 2020
ACTUALIZADO : Viernes 25 de diciembre de 2020 a las 2:45 H
8 minutos
Todos ellos fueron habitados hace mucho tiempo atrás con asentamientos que luego fueron creciendo
Aunque de alguno de los pueblos de la Península no se sabe con exactitud en qué periodo exacto de la Historia comenzaron a estar habitados, muchos de ellos son muy antiguos, eso seguro. Los hallazgos arqueológicos lo han corroborado. Otra cosa distinta es cuándo se constituyó el primer Fuero. De eso sí hay un documento escrito, y se encuentra en Brañosera (Palencia), pero hay otros lugares que también datan de hace un tiempo casi indefinido y que hoy en día constituyen parte del legado cultural de nuestro país. Estos son algunos:
Brañosera (Palencia)
El ayuntamiento de Brasoñera es oficialmente el más antiguo de España. Fue el primer Fuero de nuestro país, que se obtuvo a comienzos del siglo IX, en el año 824. Este edificio es por tanto una parada obligatoria para quienes se acercan a conocer este pueblo palentino, ubicado al sur de la sierra de Híjar. La visita es gratuita y en el salón de plenos del consistorio se explica al visitante la importancia histórica de este fuero, que supuso un hito histórico cuando se estaba gestando el Condado de Castilla.
Aunque se considera que la zona ya estuvo ocupada desde el año 450 a.C. por los cántabros, la Carta Puebla fue otorgada por el Conde Munio Núñez, bajo el reinado de Alfonso II El Casto. Esta se estructura en cinco poblaciones, que bien merecen una visita, pues cada una encierra una singularidad:
- Valberzoso, con una iglesia románica decorada con pinturas al fresco conservadas desde la Edad Media.
- Salcedillo, que destaca por su cuidado aspecto rural en torno al río Camesa, que a su vez discurre al lado de una preciosa iglesia románica.
- Orbó, desde dónde se contemplan los picos del Curavacas y del Espigüete.
- Vallejo de Orbó, hasta finales del siglo XX fue el núcleo de población más importante del municipio.
- Brañosera, en un enclave privilegiado rodeado por un circo de montañas impresionante, además de ostentar el título del pueblo más antiguo de España.
Besalú (Gerona)
Se cree que este pueblo medieval de la comarca de la Garrocha en Gerona tuvo ya un primer asentamiento poblacional en el 1200 ó 1100 a. C., en las proximidades de Can Barroca, al noroeste de la población actual. También se han encontrado restos pertenecientes a la Edad de Hierro, aunque todos estos vestigios no aportan datos fiables. Lo que sí se sabe con seguridad es que acogió un asentamiento ibérico bastante importante por los hallazgos encontrados en las excavaciones. Los más antiguos datan del periodo ibérico pleno (350-250 a.C.).
En el periodo romano alcanzó una época de esplendor, siendo una zona donde prosperó el comercio y el establecimiento de obradores. Después, en la Edad Media, el mercado de la villa obtuvo un peso económico de gran relevancia.
Hoy en día, Besalú es una población medieval con una estructura arquitectónica y urbanística bien conservada. Los alrededores, que comprenden el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa, esconden bellos paisajes entre los que se pueden apreciar más de 40 volcanes y varias coladas de lava, y desde el valle del río Fluvià hacia el norte destacan los riscos y desfiladeros.
Sepúlveda (Segovia)
Para hablar de la primera ocupación del pueblo segoviano de Sepúlveda hay que remontarse a la II Edad de Hierro. De esta época ya hay documentado el asentamiento de una tribu celtibérica. Sin embargo, como población es citada por primera vez en la Crónica de Alfonso III “como uno de los lugares que fueron despoblados en las correrías de Alfonso I contra los musulmanes”.
Será necesario esperar al año 940, cuando al conde de Castilla, Fernán González, se le encarga su repoblación, que a su vez fue quien le dio fuero. Finalmente, en el siglo XI, Sepúlveda se repuebla definitivamente gracias a la intervención de Alfonso VI. A partir de este momento, el pueblo aparece constituido ya como una entidad política territorial.
Se encuentra dentro del Parque Natural de las Hoces del Río Duratón, y en la misma localidad está el Centro de Interpretación de las Hoces del Duratón (en la Iglesia de Santiago). En este lugar se puede ver todo lo relacionado con el Parque Natural y con Sepúlveda.
Ronda (Málaga)
Los orígenes de Ronda se sitúan en el Neolítico, según los yacimientos encontrados, aunque la presencia humana en este enclave de Andalucía es anterior. Los yacimientos encontrados en la Cueva de la Pileta, guardan muestras del arte rupestre del Paleolítico andaluz, y son uno de sus mejores exponentes.
De la ocupación romana destaca el yacimiento arqueológico de la ciudad de Acinipo. Su estado de conservación es excelente, así como de algunos de los elementos más característicos de una urbe clásica del imperio, como es el teatro.
Uno de su momentos de más auge se producirá con la llegada del reino nazarí de Granada. Al estar cerca de los territorios conquistados por los castellanos, se convertirá en un espacio fronterizo que le conferirá una relevancia especial. Los Reyes Católicos la conquistarán en 1485, de modo que se producirán importantes transformaciones económicas y culturales. Esto es algo que aún perdura en la estructura arquitectónica de sus calles.
A partir del siglo XVIII, Ronda queda enmarcada de forma definitiva en el contexto de su Comunidad Autónoma y es, por tanto, en la época moderna cuando se construyen los monumentos más significativos de la aristocracia del periodo: el Puente Nuevo y la Plaza de Toros. La zona está repleta de pueblos destacados que visitar dentro de lo que se define como la Serranía de Ronda (Teba, Cuevas del Becerro, Setenil de las Bodegas, Júzcar…) y de espacios naturales de interés como la Sierra de las Nieves, la de Grazalema o Los Alcornocales.
Calatañazor (Soria)
Calatañazor está en la provincia de Soria a orillas del río Milanos, dentro de la comarca de las Tierras del Burgo. El primer asentamiento proviene de la ciudad arévaca de Voluce, que estaría aproximadamente a un kilómetro de donde se sitúa en la actualidad, desde el siglo III-II a. C. hasta el siglo IV-V de nuestra era. Durante la dominación romana permanecieron, por tanto, en esta posición, pero luego, tras las invasiones germánicas se trasladaron a la ubicación actual, el promontorio sobre el que se erige.
Dice la leyenda que en “en la Calatañazor perdió Almanzor el tambor”, es decir, que fue en esta localidad donde el canciller del Califato de Córdoba resultó derrotado definitivamente, perdiendo su título de imbatible, en una batalla que allí aconteció. Durante la Edad Media, esta urbe estuvo vinculada a personajes tan ilustres como Alfonso X, Sancho IV o María de Padilla.
En la actualidad, unos de sus atractivos turísticos es su castillo, del siglo XIV y XV, así como sus calles de trazado medieval o iglesia románica Ntra. Señora del Castillo. Conviene visitar también el Espacio Natural del Sabinar de Calatañazor, donde algunos de los ejemplares llegan a alcanzar los catorce metros de altura y cinco de perímetro.