Las tres mejores ciudades europeas para recorrer en bicicleta

Las rutas en bicicleta son ideales para los que buscan una desconexión total con la rutina diaria. Suponen un ejercicio aeróbico con un efecto muy positivo en la salud, pero además te ofrecen la posibilidad de disfrutar de bonitos paisajes y fomentan la liberación de endorfinas, conocidas como las hormonas de la felicidad. ¿En qué ciudades europeas puedes dar rienda suelta a dicha actividad?

Ámsterdam

¿Alguna vez has oído el refrán “Donde fueres, haz lo que vieres”? Es un consejo popular que invita a seguir las costumbres del lugar al que viajas. Así, al igual que en Venecia hay que montar en góndola y en Lisboa en tranvía, recorrer Ámsterdam en bicicleta es prácticamente obligatorio. Eso sí, como lo utilizan como medio de transporte prioritario, suelen ir a una velocidad superior a la que estamos acostumbrados.

De hecho, la ciudad holandesa está plagada de bicicletas, que tienen prioridad frente a los coches e incluso algunos peatones, por eso se dice que Ámsterdam tiene más bicicletas que habitantes. Además, al ser una ciudad totalmente plana, no supone un esfuerzo excesivo descubrirla mientras pedaleas. La ciudad presume de tener 400 kilómetros de carril bici que abarcan sus rincones más asombrosos.

Asimismo, hay un gran abanico de establecimientos de alquiler de bicicletas. Por ejemplo, en Central Station, concretamente en el negocio Mac Mike (@MacBikeAMS), podrás disfrutar de un servicio completo por solo 4,25 euros. Solo necesitas una copia de tu DNI y dejar un depósito de dinero para más seguridad. No obstante, si lo tuyo no es ir sobre ruedas, también puedes recorrerla a pie, la distancia entre los puntos emblemáticos es muy corta.

Copenhague

La capital danesa está hecha para los ciclistas. De hecho, por el centro de la ciudad te cruzarás más bicicletas que coches. Al igual que ocurre en Ámsterdam, es habitual que los ciudadanos utilicen este vehículo para moverse por sus calles. Por eso, la ciudad es un auténtico desfile de ejecutiv@s muy hábiles con el manillar. Es curioso, pero hay familias de clase media que no tienen coche en su garaje, pero sí un buen surtido de bicicletas.

Copenhague tiene 350 kilómetros de carril bici, que están separados de la carretera convencional para mayor seguridad. Una de sus grandes ventajas es que cuenta con bicicletas públicas gratuitas, solo debes abonar 20 coronas (3 euros) en una de las estaciones a modo de fianza. Por supuesto, recuperarás esta cantidad cuando devuelvas el vehículo. También hay empresas de alquiler en casi todos los puntos de la ciudad.

San Sebastián

La ciudad vasca es ideal para poner en práctica tus dotes como ciclista. En los últimos años, San Sebastián ha mejorado mucho los servicios que giran en torno a este medio de transporte, tanto que ya cuenta con un carril bici de más de 30 kilómetros y hasta un Observatorio de la Bicicleta. La afición por el pedaleo es cada vez mayor, por eso hay visitas guiadas, tiendas de alquiler y rutas aptas para ciclistas. Eso sí, no está permitido circular a más de 15 kilómetros por hora.

Cómo circular en bicicleta en España

• Utiliza el carril bici o los itinerarios señalizados en zonas de prioridad peatonal.

• Las bicicletas deberán estar dotadas de timbre, luces y elementos reflectantes. No es un consejo, es una obligación. Por la noche, enciende la luz delantera y trasera.

• Estaciona siempre en los aparcabicicletas. Si la apoyas sobre el lado izquierdo, aprovecharás mejor el espacio.

• En los puntos señalizados de cruce con peatones, debes cederles la prioridad.

• Las bicicletas pueden circular por la calzada y ocupar la parte central de la misma. Si circulas por el carril de la derecha, también puedes ocupar la parte central.

• Mantén una distancia de seguridad de un metro al rebasar a un peatón.

• Respeta los semáforos y los pasos de peatones.