Un paseo por Ibi, la cuna del helado y el valle del juguete

En la comarca natural de la Hoya de Castalla, entre dos cerros y a poco más de 30 kilómetros de Alicante, se encuentra Ibi (@TurismoIbi), un bonito municipio que merece la pena descubrir y recorrer sin prisas, porque, en sus calles y plazas, se palpa esa tradición heladera y juguetera que lo convierten en un lugar muy especial.

Ibi cuenta con un rico patrimonio cultural, que puedes empezar a conocer visitando algunos de sus enclaves más interesantes. La Plaza de la Palla, en el casco antiguo, la Iglesia de la Transfiguración del Señor, el entramado de calles empinadas que dan forma a la zona conocida como Les Costeretes, o la Ermita de San Miguel, en el cerro del mismo nombre y a la que cada último fin de semana de septiembre acuden en romería cientos de personas (estás a tiempo) son solo algunos de los atractivos que depara un primer recorrido por  la ciudad. Pero hay más. Especialmente si vas con niños, juguetes, helados y hasta sus majestades los Reyes Magos, te están esperando.

Lo que no puedes dejar de visitar en Ibi

En el año 2005, el ayuntamiento de Ibi celebró el centenario de la fabricación del primer juguete en la localidad, una tartana de hojalata, una pieza fabricada por la familia Payá (que fundaría una de las industrias jugueteras más importantes de España), que se considera el primer juguete comercializado en el siglo XX. La tradición juguetera creció a lo largo de décadas, casi al mismo tiempo que los helados artesanos de Ibi iban siendo conocidos en toda la geografía española.

Son muchos los lugares y monumentos que recuerdan esa arraigada tradición, que es la esencia de la localidad. Aquí se encuentra el Museo Valenciano del Juguete, ubicado en la antigua fábrica Payá, que te permitirá viajar a tu infancia o enseñar a tus nietos aquellos coches, muñecos o muebles en miniatura para casitas de muñeca, con los que quizá pasaste largas horas.

Tampoco te puedes perder un recorrido por la  Casa Gran, una antigua casa solariega, hoy convertida en el Museo de la Fiesta, esencial para conocer la tradición alicantina de Moros y Cristianos y el arraigo de esta celebración en Ibi.

Sin duda, no puedes dejar este particular lugar sin visitar dos monumentos esenciales, el de los Reyes Magos de Oriente, que se encuentra en la plaza del mismo nombre y que probablemente sea único en el mundo, y el que homenaje a los heladeros ibenses, en el Parque de Geladors.

Ibi sorprende a todo el que lo visita y para incrementar su especial magia, solo falta que la  apertura de la Casa de los Reyes Magos, un proyecto que espera crear un maravilloso espacio de ilusión para niños y no tan niños, pronto sea una realidad.