Mariola Báez
Viajes
Un recorrido por Gijón disfrutando del mar, de la montaña y de una joven ciudad milenaria
En el corazón de la costa asturiana, Gijón ofrece mil opciones para organizar una escapada perfeta
Tal vez sea precisamente esa primera impresión de contraste entre el verde de las montañas y el azul del Cantábrico que abraza la ciudad lo que haga de Gijón un lugar que atrapa al visitante desde el minuto uno.
La primera estampa probablemente sea la de su bahía, con la playa urbana de San Lorenzo como protagonista, con más o menos arena según le dé al mar, que es aquí quien marca los tiempos. En un extremo del espléndido arenal, la iglesia de San Pedro, construida a mediados del siglo XX e inspirada en el estilo prerrománico asturiano, y, al otro, el antiguo puerto pesquero, hoy coqueto puerto deportivo que conserva el sabor marinero.
¿Qué ver y qué hacer en Gijón?
Tras un primer paseo indispensable por este bonito paseo marítimo, te queda toda una ciudad por descubrir y son muchos los lugares interesantes para pasar buenos momentos. Recorrer el centro histórico enclavado en la península de Cimadevilla es un placer. Puedes empezar por la Plaza del Ayuntamiento y las calles peatonales aledañas, donde no faltan tiendas, bares y restaurantes donde tomar una sidra bien escanciada y alguna de las delicias gastronómicas asturianas es "religión".
Gijón es una ciudad viva, animada, de comercio importante, pero de ritmo pausado, para disfrutar del entorno como se merece.
En tu recorrido por el centro no pueden faltar visitas destacadas como el Palacio de Revillagigedo, la Colegiata de San Juan Bautista o la Casa Natal de Jovellanos, un bello palacio asturiano del siglo XV, donde nació el ilustre político, escritor y pensador en 1744, hoy Museo de la Ciudad.
Si quieres conocer algo más de esta ciudad tan moderna como antigua, una buena idea es acercarte a las Termas de Campo Valdés para descubrir sus orígenes romanos.
Más lugares de Gijón
Tienes otras muchas opciones para que tu fin de semana en Gijón resulte un éxito absoluto. Merece la pena visitar el Jardín Botánico del Atlántico, a escasos dos kilómetros del centro y, si lo tuyo es el medio marino, completa la visita acercándote al Acuario de Gijón.
A los amantes del senderismo les esperan bonitos caminos perfectos para conocer el medio natural que envuelve a la ciudad. Tienes donde elegir, pero entre las más apetecibles destacan la Senda del litoral, para hacerte una idea de esta costa abrupta y tranquila a partes iguales, o las vías verdes del Río Piles o de La Camocha.
Con todas estas opciones, un fin de semana se quedará corto.