El gobernador del Banco de España, Hernández de Cos, una vez más enmienda la plana al gobierno solicitando del mismo que endurezca sus políticas relativas a los salarios, los contratos laborales volviendo a proponer la mochila austriaca o las pensiones abriendo una vez más el debate de su privatización.
Nuevamente insiste en introducir la mochila austriaca e incide nuevamente en congelar la subida de las pensiones o el incremento de los salarios fundamentalmente a los servidores públicos, eso sí, él ya se ha incrementado el mismo, en el pasado 2020, a pesar de que la entidad que él gobierna ha reducido sus beneficios en un 5,2%. Debemos recordar que percibió más de 215.000 € anuales entre salario y complementos personales a los cuales debemos incorporar la subida que percibirá en el 2021.
Aumento de la brecha social
Ahora bien, tiene mérito esta obcecación para proponer políticas antisociales que sin duda incrementarán la brecha social que nos está dejando esta situación de pandemia que vivimos, aumentando la pobreza y las desigualdades sociales, generando un incremento de las colas del hambre.
Cabría preguntarse, por qué no ha insistido con la misma terquedad a la hora de cumplir el papel que su institución tiene como fin: El Banco de España es el banco central nacional y, en el marco del Mecanismo Único de Supervisión (MUS), el supervisor del sistema bancario español junto al Banco Central Europeo. Su actividad está regulada por la Ley de Autonomía del Banco de España, entre otras sus obligaciones pasan por supervisar la solvencia y el cumplimiento de la normativa específica de las entidades de crédito, otras entidades o los mercados financieros. O bien, por promover el buen funcionamiento y estabilidad del sistema financiero y los sistemas de pagos nacionales. Y decíamos que no había insistido con la misma terquedad por que si lo hubiera hecho seguramente hoy no estaríamos hablando de los cientos de millones que fueron estafados a las personas mayores con la comercialización de las preferentes por las entidades bancarias, seguramente no habríamos vivido los diferentes escándalos protagonizados por Bankia, desde su irregular salida a bolsa hasta la utilización fraudulenta de tarjetas opacas.
Dónde estaba el Banco de España, que no supo ver el agujero de más de 70.000 millones de euros que generó el sistema financiero español que él debía supervisar, agujero pagado con el dinero de todos. Y hoy dónde se encuentra, permitiendo incrementos usureros a las entidades bancarias mediante el cobro de comisiones por la retirada de nuestro dinero en ventanilla.
Políticas que solo sirven para empobrecer nuestro país
Botín, B. de Santander, ha percibido como salario en 2020, la cantidad de 6,8 millones de euros, Torres del BBVA, ha cobrado 4,05 millones y Gortázar de Caixa 2,83 millones, entre estas tres entidades van a despedir a más de 14.000 empleados y cerrarán más de 2.000 sucursales por motivos organizativos, digitales y económicos solo a la ministra Calviño le han parecido estos salarios: "inaceptables, no se corresponden con la situación del país", el gobernador del Banco de España pide congelar salarios pero no los de aquellos que son inaceptables, mejor mantener congelado el salario de los más de 2.000.000 de jubilados que se encuentran en situación de pobreza extrema o en el umbral de la misma.
Los cobros de comisiones de los planes y fondos de pensiones privados de nuestro país son los más altos de Europa, pero esto no parece ser una cuestión que le preocupe al señor gobernador, él prefiere llenar titulares, defendiendo la doctrina neoliberal y apostando una vez más por políticas de austeridad, menú que solo ha servido para empobrecer a nuestro país, a su clase trabajadora esencialmente y que ha enriquecido, una vez más, a quienes ya lo tenían todo.
Sinceramente, considero que el gobernador haría bien en preocuparse de la realización del cometido para el que ha sido designado por el gobierno en su momento, sería bueno que se preocupara de ordenar el sistema financiero, no permitir la usura de las entidades bancarias, solicitar la devolución del dinero público utilizado para tapar las negligencias cometidas por la banca… En definitiva, haría bien en dejar sus responsabilidades, si no es capaz de cumplirlas.