¿Privilegios? A los pensionistas nadie nos ha regalado nada
El problema de fondo de los mayores con la banca sigue sin estar resuelto
La subida de tipos de interés que están llevando a cabo los bancos centrales de todos los países ha obligado a cambiar las políticas de los bancos en cuanto a los tipos de interés, en función, también, del tipo de cuenta que abramos en una entidad bancaria; bien es cierto que estos cambios, casi de forma exclusiva, se refieren a la captación de nuevos clientes.
La banca en nuestro país, y seguramente en ningún otro, nunca se ha caracterizado por tener un perfil solidario, un sesgo social, más bien todo lo contrario, en general, la usura ha sido su denominador común en cuanto a su funcionamiento.
Ha llegado el momento de ver a las diferentes entidades financieras como lo que son, como organizaciones que solo buscan (esta siempre ha sido su finalidad) una rentabilidad que retribuya a sus accionistas. No olvidemos que los bancos son organizaciones privadas con ánimo de lucro, es decir, que buscan el retorno de su inversión en forma de pingües beneficios. No son la beneficencia, y nunca lo han sido.
Desde la Federación de Pensionistas y Jubilados de UGT-UJP (@UJP_UGT), consideramos que lo importante no es si dan mucho o poco interés a nuestros ahorros; debemos empezar a cambiar de entidad bancaria en función del servicio que prestan, un banco no es para toda la vida, y menos aún, no es tu banco, es decir, nos preocupa el servicio que prestan, y hoy seguimos participando de un servicio pésimo, de escasa o nula calidad. El colectivo de mayores continuamos, a pesar de los esfuerzos por regularlo desde el Gobierno, sin tener un acceso sencillo a nuestras operaciones y sin un trato presencial que resuelva nuestros problemas. Estas siguen siendo nuestras exigencias hoy incumplidas.
La usura en el trato hacia las personas mayores con bajos ingresos se mantiene como práctica habitual. El problema no es la rentabilidad de nuestros ahorros, todo lo contrario, es el abuso que se comete por el cobro de las gestiones bancarias.
Para acabar con el despropósito de las entidades financieras, es necesario aprobar en sede parlamentaria la ley ya aprobada por el gobierno de progreso, que proporciona la creación de la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero. Este es un proyecto prioritario para el Gobierno, porque incrementará la protección de los clientes financieros, que podrán presentar sus reclamaciones de forma gratuita en el ámbito bancario, de seguros y de inversión financiera ante un único organismo, lo que traerá consigo un mejor análisis de los conflictos y rapidez en el servicio.
De esta forma, esta nueva institución centralizará los actuales servicios de reclamaciones del Banco de España, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones.
Asimismo, es necesario profundizar en la aplicación de la legislación ya aprobada en defensa de los clientes y las buenas prácticas de las entidades financieras, las denominadas como Protocolo de Atención a los Mayores, y para ello es necesario aumentar las medidas de control y aplicación efectiva de la regulación vigente.
Finalmente, otra cuestión que nos preocupa es conocer cuándo las entidades bancarias rescatadas, con la solidaridad de toda la sociedad, iniciarán el proceso de devolución del capital aportado para su rescate. Acabar con los desahucios es otra de nuestras preocupaciones, debemos profundizar en la legislación, no han servido las medidas hasta ahora desarrolladas de defensa de las personas que, desgraciadamente, se encuentran en este tipo de situaciones, generadas por la crisis económica que vivimos.