Esperanza de vida y factor de equidad de las pensiones
Mariano Jiménez LasherasFoto: Carlos Luján / Europa Press
Sábado 9 de octubre de 2021
3 minutos
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Sábado 9 de octubre de 2021
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La evolución de la esperanza de vida debe ser una referencia inexcusable del sistema de pensiones, porque es un factor muy relevante para la sostenibilidad. Y, por lo tanto, debería tenerse en cuenta a la hora de introducir mecanismos de ajuste automáticos en dichos sistemas. El problema es cómo hacerlo y qué variables deberían contemplarse en el diseño de un mecanismo de este tipo.
El Factor de Sostenibilidad, regulado en la reforma de las pensiones de 2013, se limitaba a ajustar (en la práctica, significaría reducir) la cuantía de las nuevas pensiones a la evolución (creciente) de la esperanza de vida, y no establecía ningún posible ajuste en relación con la edad de jubilación. Además, lo hacía sin matices, es decir, no consideraba otras variables que son también muy relevantes desde el punto de vista de la equidad.
El nuevo mecanismo o factor de equidad intergeneracional, del que se desconoce su posible futura configuración, debería estar más orientado a establecer ajustes en la edad de jubilación (edad legal) en base a la evolución de la esperanza de vida, además de tener en cuenta otros factores que inciden en el necesario equilibrio actuarial entre lo cotizado y lo recibido como, por ejemplo, las largas carreras de cotización o el hecho de haber trabajado en diferentes profesiones o sectores de actividad que determinan una distinta esperanza de vida que la que corresponde a la población general.
En mi opinión, al diseñar el nuevo mecanismo de equidad, debería de realizarse un análisis de sensibilidad, que recoja los efectos de las variaciones en las variables utilizadas en los cálculos para poder diferenciar y recoger estos distintos efectos.
También podría plantearse que los ciudadanos puedan elegir alternativamente entre retrasar la jubilación conforme a la evolución de la esperanza de vida o soportar un ajuste de la pensión derivada del comportamiento de aquella.
Sea como fuere, es indiscutible que, para mejorar el equilibrio actuarial del sistema de pensiones español, sería muy importante contar con algún tipo de instrumento de ajuste automático, que impulse la sostenibilidad del sistema y al mismo tiempo sea capaz de velar por la suficiencia de las pensiones.
Mariano Jiménez Lasheras (@MjimenezLash) es presidente de OCOPEN (@OCOPEN_) y director general de CPPS Asesores