'Coitus corruptus': la corrupción sacude España

"Si Moisés hubiera vivido en estos tiempos, vería cómo la Tierra Prometida se recalificaría"

Si pudiera describir lo que pienso, lo expresaría con un anuncio en la prensa:

"Por extinción del modelo de gobernanza, durante años, de un país, el Reino de España, país soberano, miembro de la Unión Europea, constituido en Estado Social y Democrático de Derecho, necesita de forma urgente una nueva forma de Gobierno orientada en la Gestión Muy Transparente. Es necesario y obligatorio que las propuestas presentadas estén respaldadas por personas que crean en la alta responsabilidad del trabajo a realizar, y no incurran en cualquier sesgo de ideologías obsoletas y perjudiciales. Se valorará el compromiso social hacia las personas. Se podrán presentar tanto hombres como mujeres que hayan pasado previamente unas pruebas de ética y de moral, y se comprometan a generar Estado de bienestar".

Este anuncio, que más bien parece utópico, es un grito de muchos al derecho a la esperanza, y espera la obligatoria sensatez de las personas que dirigen nuestros futuros. Se llaman políticos, pero antes, son personas. Hay pensamientos de muchos que son como este que acabo de escribir, y ni mucho menos vivimos en el País de Oz. Tenemos los pies en el suelo. 

Comienzo a escribir con interés este artículo, era algo que tenía en mente, pero no sabía, o no daba con el título correcto. Me ha recomendado el médico del alma que suelte la rabia, pero de una forma civilizada. El último día del año, 31 de diciembre de 2023, me levanté con la esperanza de que 2024 sea un año de soluciones. Todos los años lo hago, pero… 

Daba vueltas al titular por lo que había acontecido y estaba aconteciendo, no hay arreglo, y cuando me estaba afeitando, un brote de imaginación me viene, y digo: ¡Ya está!, llamaré a mi artículo Coitus corruptus. Ya sabemos lo que significa coitus: cópula, unión, y la palabra corrupción viene del latín corruptus, que significa “romper o destruir”. La corrupción destruye y cercena de golpe la confianza, un activo fundamental en colectivos que siguen las reglas o decisiones de la política. La corrupción es la cópula o unión del poder que tiene acceso al dinero público, al dinero de todos, y describe el uso inmoral de este. Dinero de todos, desgarrado y saqueado de las arcas que han sido nutridas, bien nutridas, por gente honrada. En la corrupción siempre existen dos variables, como he dicho anteriormente: el poder y el dinero. Quien tiene poder, y se perdió, en su momento, la clase donde se describía la ética y la moralidad: malo, se le quedó un cerebro muy pobre para utilizar un cargo de relevancia, y que este tuviera influencia en el Estado de bienestar; tantas veces mentado, y tantas veces deseado, y tantas veces transgredido. Cuando menciono Estado de bienestar, me refiero al de todos, no al Estado del bienestar del corrupto o de los corruptos.

No podemos memorizar todo el dinero saqueado

En este país, España, claro está, las cosas lloran de impotencia, las ideas positivas rezuman lágrimas, los ojos no contemplan esperanzas, las cabezas están gachas, la justicia no es justa, los buenos tienen que ser malos, los malos, peores, el aire está enrarecido de palabras gastadas, hay muchas reglas, y nos perdemos, porque no podemos memorizar todas, el dinero saqueado por esos que practican el Coitus corruptus. Es dinero robado al sacrificio honesto, no tienen reglas. La burbuja de la indignación es energía, está muy henchida, ya no se puede más; la explosión puede llegar en cualquier momento.

Creo que esta situación actual no solamente está provocada por la mala gestión del partido que esté en el poder, sino que se provoca por no tener, todos, un sentido común sencillo. El sentido común sencillo es antidepresivo. Las personas, hablando genéricamente, lo complicamos todo; lo enredamos. La crisis de 2008 la provocó la avaricia, la codicia, tanto en políticos, como en empresas, como en.… todos los sitios donde abunda poder, el dinero de otros... Saqueo con frenesí. La especulación, ganar dinero fácil y rápido, sin esfuerzo, ha sido el deporte nacional. En cada sombrío desastre, los buitres acechan con ojos hambrientos, listos para devorar la desgracia ajena. Es un acto de vileza indescriptible aprovecharse y lucrarse mientras existía un dolor inmenso, lágrimas derramadas durante la pandemia; una pandemia que nos ha marcado profundamente.

Las arcas de nuestro Estado sufren continuamente zarpazos y tarascadas de esos que tienen el poder y muy cercanos al mismo, aprovechándose de su condición, desgarran para lucrarse, a través del delito, del gran esfuerzo de la sacrificada contributividad de los ciudadanos.

Hemos perdido el norte, creo que nos han cambiado los polos y estamos viviendo desorientados y polarizados, sin "Patrón y sin Bandera, por donde la corriente quiera", como dice José Manuel Serrat en su Barquito de papel. 

Ciudadanos agotados, hastiados

El Gobierno y partidos opuestos tienen que regalar obligatoriamente sensación de confianza; tanto unos como otros dejan mucho que desear en todos sus gestos verbales, son palabras extremadamente cansinas y que agotan a la gente de este país, en el que hay muchas voces del pueblo que reclaman justicia social, y no se les tiene en cuenta, son (somos) invisibles.

Hay narrativas vacías cuando llegan elecciones, no son sólidas, no son verdaderas; vacías, son vacías.  Nos hemos convertido en un país tóxico y cansado. Particularmente, me han hecho consolidar mi ateísmo político. Formo parte del equipo de ASJUBI40 (@asjubi40), vivo en primera persona la negación a hacer justicia a todo un colectivo que sí cumplió con su cometido, aportando a este país, desde esa bonita época de la infancia y adolescencia, hasta que las mezquindades lo apartaron del mundo laboral a unas edades muy problemáticas, sin ninguna opción de reincorporación, pero con una alta contribución realizada.

Es de maldecir al grupo de gestores de este país cuando dice que no hay dinero para sufragar la injusticia, y mientras tanto, de vez en cuando, y porque se investiga, ves pasar por tus narices el demonio de la corrupción robando nuestro dinero, ¿y no hay dinero para nosotros? Manda…..

Y cuando ves que la tan anunciada y reclamada auditoría de la Seguridad Social no se hace, ¿qué puedes pensar? ¿Se cumplirá ese dicho que reza: piensa mal y acertarás? Particularmente, tengo mis dudas desde hace tiempo. Según he escuchado, hay cerca de 495.000 millones de euros que están por ahí, pero no encontrados. ¡Lo que hay que aguantar! Ya no tenemos que pedir que se haga, tenemos que denunciar.

Las urnas verán en su interior papeletas de participación introducidas por la inercia de algo al que le llamamos democracia, presumo que bajará el porcentaje de participación. La publicidad que ejerzan en los mítines tendría que tener un certificado de cumplimiento de lo prometido. Porque en los mítines, lo que se hace es: primero, desprestigiar al contrario, y segundo: prometer, prometer y prometer... bienestar. El mitin es un acto fácil, que también cuesta mucho dinero, y que alienta (arenga) a las masas sobre la base del separatismo; divide y vencerás. Ahí está el secreto.

Mapa de la corrupción

La sensación que se percibe es que todo está mal hecho, y ahí tenemos los "delitos de corrupción". En España ya hay un tercer mapa, está el geográfico, el político y el mapa de la corrupción. Casos Malaya, Gürtel, Púnica, ERES, Astapa, Pretoria, NÓOS... y ahora el caso Koldo, que no sabemos dónde parará. La venta de las mascarillas, por volumen y necesidad, despertaron a esos buitres, con detritus en su cerebro, que pululan por todos los sitios. Son tantos, que el mapa de España está cultivándose de banderitas donde han sido perpetrados, sin ningún tipo de escrúpulos, actos inmorales que tendrían que tener su premio en las bases del Código Penal. No hay uno más que otro, antes de ser políticos, son personas que se perdieron la clase de ética y moralidad. Casos de Coitus corruptus saldrán y algunos serán denunciados, y otros quedarán ocultos, por desgracia. Dar dentelladas y zarpazos al dinero público, dinero de los contribuyentes, merece la publicación de todos los nombres, y sobre todo, que cumplan su castigo de inmediato, con la devolución íntegra del dinero distraído, que España lo necesita. El Código Penal tendría que ser más implacable, más duro para estos delitos.

Este año veremos cómo el umbral de la pobreza es, una vez más, traspasado por numerosas personas o familias. Es aberrante pensar que mientras unos pasan o pasarán penurias, otros, en los que su moral está llena de basura, dormirán en colchones de plumas y sábanas de seda.

Mi pensamiento está siempre en la concordia, tolerancia, firmeza, y en el trabajo en equipo: gestión.

Dicho está. Suerte para todos. 


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