Cuando físicamente no se puede trabajar más

De verdad, ¿no existe nadie que entienda que hay profesiones que no te permiten, llegada cierta edad, hacer el mismo trabajo que se ha estado haciendo hasta ahora con las mismas fuerzas de 10 años atrás? No todo el mundo tiene un sillón mullido en el Parlamento donde puedes ir hasta incluso a dar alguna cabezada, y encima cobrar a fin de mes una burrada de euros.

Me incluyo cuando digo que somos muchos los que tenemos los huesos destrozados de cargar mucho peso y sufrir continuamente presiones parar rendir más y cobrar menos. Y me incluyo cuando digo que, sin fuerzas, tengo que seguir trabajando, para que en los cinco o diez años que me queden después de jubilarme, no tenga que pedir ayuda a mis hijos, porque ellos lo tienen todavía peor.

Qué pena de dirigentes, de leyes y de país, con lo bonito que era. Que Dios reparta suerte y humanidad, que falta hace.

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