El sistema público de pensiones es sostenible, a pesar de los intereses en contra

 

Los datos de la contabilidad nacional muestras que el sistema público de pensiones es sostenible, a pesar de los intereses en contra.

En los once primeros meses del 2021, los fondos de la Seguridad Social registraron un superávit de 1.222 millones, frente al déficit de 18.443 millones alcanzado en el mismo periodo de 2020. En términos de PIB, el superávit de la Seguridad Social se sitúa en el 0,1%, mientras que en el mismo periodo del año anterior se alcanzó un déficit que suponía el 1,64%.

Este mejor comportamiento es consecuencia de un crecimiento de los ingresos del 6,4% (destaca la buena evolución de las cotizaciones con un crecimiento del 5,1%) frente al descenso registrado en los gastos de un
4,3%.

Si se descuenta tanto en 2020 como en 2021 el impacto asociado a la Covid-19, el subsector de los fondos de la Seguridad Social habría obtenido un superávit de 11.487 millones en noviembre de 2021, y de 8.332 millones de 2020.

Estos datos de la contabilidad nacional demuestran una vez más que la Seguridad Social es perfectamente sostenible. Si no lo ha sido en el pasado es debido, a que se le han cargado gastos que no le correspondían y a que intencionadamente, se agotó el fondo (HUCHA) de las pensiones.

Y decimos intencionadamente, porque con ello, se perseguía que el Estado no asumiera sus obligaciones traspasándolas a la Seguridad Social, aunque no le correspondieran. Seguimos esperando que se cumpla el acuerdo del Congreso, y realizar la auditoría de los gastos de la Seguridad Social que se desviaron a otros fines.

Hay otra segunda intención mantenida desde hace más de cuarenta años, convencer a la población española de que el sistema público de pensiones no es sostenible. Las pensiones son una partida muy golosa de la que están tratando de apropiarse los bancos y fondos de inversión. Para ello, tratan de convencernos de que no son sostenibles y de que, si no invertimos en planes privados, no tendremos pensiones públicas cuando nos jubilemos.

Para el poder financiero y los distintos gobiernos, es muy importante que la Seguridad Social continúe en déficit, ahora que tiene superávit al hacerse evidentes los gastos impropios que le cargaban, y gracias a un mayor control de los abusos laborales, viene el próximo ataque a su solvencia. 

Reducir las cotizaciones de las empresas a la Seguridad Social, a cambio de que aporten a planes privados de empresa, es el próximo proyecto del Gobierno y frente a esto, el Movimiento Andaluz en Defensa de las Pensiones Públicas (MADPP) junto con el resto de los movimientos de pensionistas del estado se movilizará. 

El futuro de las pensiones públicas sigue en peligro, a pesar de lo que nos quieren hacer creer.

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