Miércoles 15 de febrero de 2023
2 minutos
La rebeldía es un de comportamiento humano elegido. Puede ser positivo o negativo. En las próximas líneas, hablaré de mi caso.
Soy rebelde e inconforme; lo fui desde mi niñez y ahí me quedé. Por coherencia. Sensible a la realidad mundial, y de las mujeres.
Me identifico con los rebeldes; los que se aplican, y no con los que sueñan, que nunca hacen y después se quejan. O que se lamentan por lo que no hicieron.
Considero que ser rebelde es pensar y actuar por uno mismo. Es querer ser libre. Es una manera ser independiente y autónoma. Buscando la individualidad y utilizando el libre albedrío.
Es romper el molde del sometimiento.
No es: “si te pegan en una mejilla, poner la otra”.
Valiente para demostrar mi desacuerdo ante lo establecido.
Jesús fue un rebelde ante el sistema.
No es transgredir; es cuestionar las normas a las que estamos sometidos.
Si no soy rebelde reprimo mis sentimientos y me queda la insatisfacción.
La rebeldía acaba con la pasividad.
La rebeldía nos despierta.
Soy empática con la rebeldía bien entendida.
Los rebeldes somos creativos, necesarios.
Quiero seguir siendo rebelde y ayudando a construir un mundo mejor.
Los rebeldes son los idealistas prácticos, porque ellos crean un futuro sin basura.
Fui rebelde contra los internados de tiempos pasados que nos aislaban del mundo y su realidad.
Rebelde contra la disciplina extrema que quitaba los derechos y traumatizaba.
En los internados revisaban la correspondencia escrita que entraba y salía.
Rebelde contra el machismo y el patriarcado, donde la mujer no tenia ni voz ni voto. Y ahora, tampoco.
Rebelde contra el autoritarismo, la desigualdad y contra los gobernantes que no han hecho nada para terminarla.
Ahora rebelde contra los medios de comunicación por no informar la verdad completa.
A la vez sumisa porque todo lo he aceptado, aguantado, pero termino con un mensaje positivo. Agradecida con la vida por darme la oportunidad de ver tantos cambios, tantos avances que hace 96 años, ¡casi un siglo!, no conocía.
Invito a todas las mujeres, sobre todo a ellas, a aplicarse con la rebeldía. A mi me ha ido muy bien.