Ana Lucas
Opinión

Las personas bondadosas tienen mejor salud física y mental

Ana Lucas

Viernes 2 de agosto de 2024

ACTUALIZADO : Jueves 19 de septiembre de 2024 a las 10:42 H

4 minutos

Las personas bondadosas tienen mejor salud física y mental

Viernes 2 de agosto de 2024

4 minutos

Una vez leí que Kapuscinski, uno de los maestros del periodismo moderno con más impacto en todo el mundo, decía que para ser un buen periodista había que ser una buena persona. Se me quedó grabada esa frase. La verdad es que valía para cualquier profesión. Seas lo que seas, es importante, que por encima de todo, seas buena persona. Y es importante porque la bondad no es que esté sobrevalorada, es que en los tiempos que corren, no está considerada un valor en sí mismo.  Sin embargo, desde el punto de vista de la psicología, la bondad es un valor transversal, que impacta de forma positiva en la vida de cualquier persona.

La bondad, entendida como el conjunto de valores que gobierna la vida de las personas es mucho más que un seguro de vida que nos garantiza vivencias y años de tranquilidad y adaptación a nuestro entorno, es una filosofía de vida que solo tiene aspectos positivos.

Tras la bondad hay valores superiores del ser humano como son la empatía, la moral y la ética. Cuando decimos de alguien que es una buena persona, estamos asegurando que tiene un imperativo categórico moral que le facilita entender a los demás, conectar con el entorno y ayudar al prójimo como a todos nos gustaría que nos ayudasen. Lo mismo sucede con la resiliencia, esa capacidad de levantarse tras un tropiezo saliendo de una situación dura con un aprendizaje que nos permitirá gestionar mejor tropiezos futuros.

En un mundo que a menudo parece lleno de desafíos y adversidades, mantener la bondad puede parecer una tarea ardua. Sin embargo, ser una buena persona, a pesar de las circunstancias vividas, no solo es una elección valiosa desde el punto de vista ético y moral, sino que también tiene profundos beneficios para la salud mental y física.

 

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Lo mismo sucede con la resiliencia. Definimos la resiliencia como la capacidad de recuperarse de las adversidades, adaptarse y seguir adelante. Es una habilidad que se desarrolla y fortalece con el tiempo, a menudo a través de experiencias dolorosas o desafiantes. Ser resiliente no significa evitar el dolor o la dificultad, sino enfrentarlos con una actitud constructiva y encontrar maneras de crecer a partir de ellos. Las personas que practican la bondad y la compasión tienden a experimentar niveles más bajos de estrés. La bondad activa respuestas fisiológicas en el cerebro que reducen el cortisol, la hormona del estrés. Menos estrés significa una menor probabilidad de sufrir enfermedades crónicas, como hipertensión y enfermedades cardíacas.

La resiliencia y la bondad están estrechamente vinculadas a una mejor salud mental. Ser bondadoso no solo beneficia a quienes reciben actos de bondad, sino también a quienes los realizan. La gratificación y el sentido de propósito derivados de ayudar a otros pueden mitigar los efectos de la depresión y la ansiedad.

Las personas bondadosas y resilientes tienden a construir y mantener relaciones sociales más fuertes. Las relaciones sociales saludables son un factor protector contra el aislamiento y la soledad, ambos asociados con una vida más corta y una peor calidad de vida.

Diversos estudios respaldan la conexión entre la bondad y la resiliencia con una vida más larga y plena. Muchas investigaciones a largo plazo han demostrado que los actos de bondad aumentan la producción de oxitocina, una hormona que promueve la vinculación social y se asocia con una mayor longevidad debido a su impacto positivo en la capacidad del cuerpo para manejar el estrés y recuperarse de enfermedades.

El secreto es muy sencillo. Se trata de apreciar lo positivo en la vida, incluso en tiempos difíciles.  Esa actitud ayuda a reducir el estrés y aumentar la conciencia emocional, fomentando una inercia más bondadosa hacia uno mismo y hacia los demás. Realizar pequeños actos de bondad de manera regular fortalece el sentido de tranquilidad interior, sentido de la justicia, apego a la comunidad que nos rodea y fomento de la resiliencia personal.

Sobre el autor:

Ana Lucas

Ana Lucas

Ana Lucas es una destacada psicóloga y directora de Psico-Salud, ubicada en Madrid.

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