Sinzo Abe ha presentado su dimisión por razones de salud. Padece colitis ulcerosa.
Hay quien dice que es el gran mal de Occidente. Se trata de una enfermedad cuya causa no se conoce en profundidad pero de la que se sabe cada vez más.
Aunque se hable en general de enfermedad inflamatoria intestinal (EII), realmente bajo esa siglas se sitúan dos patologías, dos dolencias concretas: la colitis ulcerosa y la llamada enfermedad de Crohn. Son distintas aunque a veces no resulta fácil establecer la diferencia. Porque se basan fundamentalmente en una inflamación del tubo digestivo y del lugar donde esa inflamación se localice, depende que sea una u otra.
(La de Crohn es mas general y se refiere casi a todo tracto digestivo, mientras que la colitis ulcerosa se reserva para referirse a la enfermedad inflamatoria del colon y del recto).
Es una dolencia crónica, es decir que una vez instalada tiene difícil curación aunque tiene un tratamiento que puede ser eficaz. Afecta a jóvenes entre los 15 y 29 años y a adultos entre 55 y 65 años. En España se puede calcular que afecta, como en los países occidentales, a una de cada 10.000 personas.Y aunque la frecuencia real no se conozca sí puede constatarse un aumento significativo como en los países de nuestro entorno.
Es, en principio, una enfermedad difusa, que puede ser compatible con alguna otra alteración intestinal. Sin embargo, pronto el especialista realiza el diagnóstico. Porque los síntomas se van acentuando. La diarrea por ejemplo, común en las dos dolencias, se hace tan frecuente que es casi incapacitante (hasta 20 deposiciones diarias), con sangre, con dolor, con fiebre en algunos casos, con mal estado general. Y claro, pérdida más que notable de peso. Nos comentaba un especialista que había pérdidas de hasta 40 kilos.
No se sabe el por qué de esta inflamación intestinal. Las hipótesis, apoyadas por la distribución de la enfermedad, apuntan a la posibilidad del tipo de alimentación y especialmente a dietas ricas en hidratos de carbono que pueden tener además un especial papel en el desarrollo de la dolencia.
Y un detalle muy curioso: dentro de un mismo país, la enfermedad afecta más en las zonas industriales que en las áreas rurales. Y en los países industrializados se da con mayor frecuencia en las zonas frías que en las cálidas.
Seguramente porque están sometidos a los mismos factores, los familiares directos de una persona con Enfermedad Inflamatoria Intestinal, tienen cuatro veces mas de posibilidades de desarrollar la afección. Pero insistimos: los familiares directos suelen participar de los mismos factores ambientales (industrialización, zona fría) y de los mismos hábitos dietéticos.
Son enfermedades relativamente recientes y con un crecimiento progresivo. La enfermedad de Crohn se describió en 1932 y tres años mas tarde la Colitis Ulcerosa. En la colitis el síntoma mas frecuentes es la diarrea con sangre a veces precedida de dolor abdominal. En la de Crohn, es más frecuente el dolor abdominal con diarreas, pero sin sangre.
No hay un tratamiento específico para su curación. El quirúrgico, pese a los avances de los últimos años, es complejo y puede tener complicaciones además de extirpaciones masivas. Las nuevas técnicas de cirugía permiten intervenir la colitis ulcerosa sin dejar ano artificial.
Casi todas las personas con enfermedad inflamatoria intestinal llevan una vida normal, familiar, social y laboral, aunque ciertamente se producen en ocasiones picos de agudización de la enfermedad que requieren hospitalización. Cuando no es así, el enfermo está libre de síntomas.
En el caso de colitis ulcerosa el paciente debe someterse a revisiones periódicas ya que, aunque no es frecuente, puede degenerar en otro tipo de problemas.
La Fundación Española de Patología Digestiva difundió estos 8 puntos sobre la enfermedad:
- Tanto la colitis ulcerosa como la enfermedad de Crohn pueden aparecer en todas las edades, pero son de mayor frecuencia entre los 20 y los 30 años. Se produce más en la mujer, en los países desarrollados y en personal con alto nivel socioeconómico y cultural.
- Entre un 15 y un 20% de pacientes tienen algún familiar próximo afectado por la misma enfermedad. Esto sugiere la existencia de algún condicionamiento genético, pero también podría explicarse por algún factor ambiental compartido por la familia.
- Como en toda enfermedad crónica es esencial una buena nutrición. Las comidas suaves producen menos molestias que las muy condimentadas o ricas en fibra si la enfermedad esta activa.
- Algunas investigaciones han demostrado la existencia de alteraciones de sistema inmunológico, aunque no se ha podido determinar si son causa o consecuencia de la enfermedad.
- Muchos especialistas piensan que la enfermedad inflamatoria intestinal podría estar causada por alguna bacteria o algún virus.
- NO hay evidencia de que los trastornos emocionales, tales como situaciones de infelicidad en la infancia, puedan ser causa del desarrollo de estas enfermedades.
- En la colitis ulcerosa la eliminación quirúrgica de todo el colon y el recto proporciona una cura definitiva y permanente. En la actualidad hay técnicas quirúrgicas que evitan la instalación de un ano artificial.
- En la enfermedad de Crohn la cirugía es necesaria cuando el tratamiento farmacológico ya no permite controlar los síntomas o cuando se producen complicaciones como la obstrucción intestinal. Entonces la cirugía no es curativa aunque permite evitar algunos problemas importantes que ocasionan complicaciones de la enfermedad.